La agresión a un médico y a un enfermero sufrida hace dos fines de semana en el centro de salud de Socuéllamos (Ciudad Real) ha provocado que el sindicato de Enfermería Satse haya mostrado su apoyo a estos profesionales sanitarios, exigiendo al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) que adopte medidas para evitar nuevas agresiones.
Fue una persona la que agredió tanto verbal como físicamente al médico, que también «le tocó» a un enfermero que intentó ayudar al médico.
Por eso esta mañana han celebrado una concentración a las puertas del centro de salud, en la que han leído un manifiesto a través del que pedían que se tomaran medidas «para garantizar la seguridad de los trabajadores del centro». Y una revisión del Plan Perseo, «puesto que se está mostrando claramente insuficiente para resolver los conflictos entre profesionales sanitarios y pacientes».
Recuerdan que las agresiones a los profesionales están tipificadas como un delito contra la autoridad sanitaria y piden también a los sanitarios que denuncien las agresiones como mejor instrumento para disuadir a los posibles agresores, «así como para que se refuercen las medidas de seguridad en los centros y se aumente el número de profesionales».