La presidenta del Partido Popular de Castilla-La Mancha y secretaria general de esta formación a nivel nacional, María Dolores de Cospedal, ha destacado que el empleo es una garantía para la igualdad.
Cospedal ha participado en Ciudad Real en el acto de inauguración de la Asamblea Provincial y Regional de Afammer (Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural), de la que es presidenta de honor.
Un día después de la celebración del Día Internacional de la Mujer, Cospedal ha recordado que «el empleo y la recuperación económica, que están llegando a nuestro país, se traducen en que hoy 254.000 mujeres en España tienen un puesto de trabajo y hace un año no lo tenían; y hoy más de las mitad de mujeres que abandonan el paro en Europa son españolas y en 2011 siete de cada diez mujeres que iban al paro en Europa eran de nuestro país».
Además se ha referido al Plan para la Promoción de las Mujeres del Medio Rural, que es «el primer plan que ha habido en este sentido en España y ha sido impulsado por el Gobierno de España». Cospedal ha destacado que «hay seis millones de mujeres en España que viven en este medio, de las que más de medio millón viven en Castilla-La Mancha porque somos una región de pueblos».
Cospedal ha señalado que «lo decimos con mucho orgullo» y ha asegurado que «cuidar de nuestras tradiciones y de nuestra cultura es una parte muy importante de la creación de riqueza y puestos de trabajo para nuestro presente y nuestro futuro».
Además de esto, la dirigente popular ha asegurado que «la política de la Mujer debe ser transversal», y es lo que Afammer recuerda todos los días y lo que persigue también el referido Plan de Promoción de las Mujeres del Medio Rural.
OPORTUNIDADES LABORALES
Cospedal ha destacado, asimismo, que el reto también es que «todo el esfuerzo que se ha hecho por la educación, equiparando la formación de los hombres y las mujeres para poder tener igualdad de oportunidades laborales, no podemos permitir que vaya marcha atrás».
Por último ha condenado la violencia de género y ha asegurado que contra la misma «no puede haber absolutamente ninguna excusa ni justificación, y esa es la labor que tenemos también en la familia, como es educar en la igualdad y el respeto, sea cual sea el género de la otra persona», ha concluido.