El CSI-F ha denunciado hoy que los servicios de Urgencias de los hospitales de la provincia de Ciudad Real registran saturación de personas después de que desde el pasado día 1 de junio se cerrasen 170 camas hospitalarias.
En un comunicado de prensa, el sindicato ha señalado que en el Hospital General Universitario de Ciudad Real la situación ha obligado a sus responsables a abrir algunas camas de las clausuradas, lo que «ha traído más desorganización al no existir un plan de contingencia ni un protocolo a seguir en estas situaciones».
Otros hospitales de la provincia, ha completado, tienen sus servicios de Urgencias saturados, pese a lo cual «no se procede al desbloqueo de las camas cerradas ni se contrata personal para reforzar estas situaciones de colapso», ha añadido.
Por ello, el CSI-F ha exigido a las Gerencias de los centros hospitalarios que, ante esta situación, agravada por la ola de calor que se prevé sea larga y que aumenta la afluencia de pacientes a estos servicios, refuercen los sistemas y planifiquen de manera adecuada cómo abordar estas situaciones con un protocolo dotado de recursos y el personal necesario.
De esta manera, ha concluido, se garantizará «una atención digna y de calidad» y, además, se dejará de «sobrecargar continuamente a los profesionales que se encuentran ya desbordados».