El presidente de la Diputación Provincial de Ciudad Real, Nemesio de Lara, ha hecho un llamamiento para que niños saharauis del programa «Vacaciones en Paz» sean acogidos en verano por familias ciudadrealeñas.
En rueda de prensa, De Lara ha explicado que la Diputación de Ciudad Real hace una llamada a las familias de la provincia para que durante los meses de julio y agosto acojan en su casa a un niño o una niña saharaui.
De Lara, que ha estado acompañado por los delegados saharauis en Castilla-La Mancha y en Ciudad Real, Bulahe Mohamed y Abdelahe Almed, respectivamente, y de los responsables de «Vacaciones en paz», Silvestre del Río y Paco Real, ha comentado que la respuesta de los núcleos familiares es de vital importancia porque aún quedan 54 niños que no tienen asignado hogar para la temporada estival.
Ha reconocido que es «muy complicado» acoger en tiempos duros marcados por la crisis, porque, las causas que más impiden proceder de este modo suelen ser económicas, familiares y personales.
En cualquier caso, ha señalado que, por encima de todo, debe prevalecer el hecho de que «la gente de Ciudad Real sabe actuar con generosidad en momentos difíciles».
Según el presidente de la Diputación ciudadrealeña, los motivos económicos no deben constituir impedimento alguno porque se da la circunstancia de que la institución provincial sufraga los costes de desplazamiento, que el año pasado ascendieron a 118.000 euros.
Por eso, ha apelado a la conciencia moral de los ciudadrealeños y les ha recordado que «donde comen dos, comen tres».
De Lara ha recordado que el objetivo de esta actividad es que los niños y niñas saharauis sean apartados por unos meses de los campamentos de refugiados, donde la vida es muy dura.
Además, ha señalado, su llegada a España también posibilita que, si lo precisan, estos niños puedan ser examinados por los médicos. Según el Gobierno español, este verano vendrán a España 4.589 niños y niñas saharauis si hay suficientes familias que los acojan.
Castilla-La Mancha gestionará la estancia de 285 de estos niños, que llegarán a la región en dos expediciones las madrugadas del 30 de junio al 1 de julio, y del 1 al 2 de julio, y volverán a los campamentos de refugiados saharauis el 1 de septiembre.