Gredos. Éste es el sitio preferido por Jesús García Villaraco, secretario general de CC.OO. en Toledo, para pasar sus vacaciones. Y es que Villaraco tira más por el monte que por la playa porque, como él dice, la edad no perdona y «ahora me fastidia mucho el calor, sin embargo cuando era más joven me encantaba la playa».
Aquella era otra época, cuando su hijo era pequeño y pasaban los veranos en la costa española. «Íbamos por toda la costa. Galicia, Huelva, Almería, Castellón… Y recuerdo que nos íbamos más tiempo, creo que antes estaba todo más barato porque normalmente nos íbamos para 15 días», matiza Villaraco.
Lo normal es viajar a Gredos para desconectar, del día a día, en tierra abulense. «Vamos en plan familiar porque la madre de Isabel, mi mujer, tiene allí una casa», comenta Villaraco.
Durante esos días de descanso, Villaraco suele aprovechar para hacer una de sus actividades preferidas, pintar al óleo. Además, pasea y disfruta de los baños en los riachuelos de la sierra.
Siempre que ha podido ha viajado a Gredos. Desde muy joven ha visitado esta zona de Ávila, como se puede apreciar en una de las fotos donde ya tenía su característica barba. «Me dejé barba cuando salí de la mili. Era un acto de rebeldía», señala. Una rebeldía ante el sistema que les llevaba incluso a montar su propia obra de teatro o a dirigir su programa de radio en radio «Chicharra».
DE LA SIERRA ABULENSE AL NORTE DE EUROPA
A la hora de viajar, prefiere ir a los países del norte. El país que le ha enamorado ha sido Brujas. Sus canales y su arquitectura le han llamado especialmente la atención, «parecía que estábamos dentro de un cuadro», comenta Villaraco quien señala que «es que las ciudades del centro de Europa son preciosas».
Villaraco también ha estado en Praga o Roma, ciudades que también le ha encantado, aunque sin duda ha sido Brujas la que más le ha cautivado.
Normalmente aprovechan los tres días del puente del Corpus para viajar al exterior, mientras que los días de verano prefiere dejarlos para viajar hasta Gredos.
Para el recuerdo quedarán los verano que pasaba en su pueblo natal, Torralba de Calatrava. Por aquella época, pasaba los veranos con su abuelo en la huerta. «Estuve muchos años en el campo, hasta que tuve los 13 ó 14 años», comenta el secretario general de CC.OO. en Toledo.
«Recuerdo que cuando era pequeño no había vacaciones. La primera infancia me dijo mi madre que me iban a dar vacaciones, pero llegue llorando a casa porque no me habían dado nada», broma Villaraco.
Como las vacaciones son para descansar, Villaraco prefiere viajar con su esposa, siempre solos, y a zonas del interior o países del norte de Europa.
A la hora de viajar, no le da miedo el tema del idioma porque «soy muy atrevido con este tema. También es verdad que hay muchos españoles que salen y por eso hay muchos sitios en los que ya se habla castellano», matiza Villaraco.
Las recomendaciones que hace se centran, por un lado, en Gredos, porque «es una joya, un lujo, al lado de nuestra provincia»; y por otra parte Brujas, sobre todo sus canales que son los que llamaron especialmente la atención al secretario general de CC.OO. de la provincia de Toledo.
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