Un total de 85 extranjeros no comunitarios han sido detenidos en Ciudad Real desde principios de año por estancia irregular, en el marco de una operación llevada a cabo por la Policía Nacional y la Oficina de Extranjería de Ciudad Real.
Según ha informado la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha, la operación ‘Odisea’ se inició a principios de enero ante el «aumento considerable» de las solicitudes de autorización de residencia y trabajo en la Oficina de Extranjería de Ciudad Real por parte de extranjeros no comunitarios.
Estas personas pretendían regularizarse en España por la vía excepcional del arraigo social y presentaban continuos precontratos de trabajo con empleadores de la provincia, en especial en la actividad de empleadas domésticas y agricultura.
La sección de Trabajo de la Oficina de Extranjería de Ciudad Real facilitó un listado de las solicitudes presentadas de autorización de residencia temporal por la circunstancia excepcional de arraigo social durante 2011, que superaba las 400 solicitudes. Se daba la circunstancia de que muchos solicitantes presentaban una nueva petición al serle denegada la anterior.
Según la Delegación del Gobierno, «muchos» solicitantes de este tipo de autorización tienen decretada una resolución de expulsión pendiente de ser ejecutada, y para poder acceder a una tarjeta de residencia en España suelen «comprar» contratos de trabajo en puestos irreales o imaginarios, por los que pagan entre 1.000 y 2.000 euros a empleadores «sin escrúpulos».
A la vez, muchas empresas que facilitan estos contratos de trabajo tienen, a su vez, deudas tributarias con las administraciones por lo que se deniega la autorización solicitada y el extranjero se ve obligado a conseguir un nuevo contrato de trabajo, pagando dinero, para presentar una nueva solicitud de residencia en España.
La Policía continúa con las investigaciones para localizar a más extranjeros y empleadores y averiguar si los contratos de trabajo formalizados se corresponden con puestos de trabajo reales o fueron realizados a cambio de dinero y con la única finalidad de que el extranjero extracomunitario se regularice en España.