Dos cooperantes ciudadrealeños que se encontraban participando en el proyecto «Profesores en el Sahara» han sido repatriados a España ante la situación que se vive en Argelia y su posible incidencia en los países del entorno, tras el reciente ataque terrorista a las instalaciones de gas de In Amenas.
Según ha explicado a Efe Cristina Martín Plaza, uno de los dos cooperantes repatriados, el Ministerio de Asuntos Exteriores les ha pedido que abandonaran el Sahara ante el riesgo de que se pudieran producir situaciones de inseguridad tanto para ellos como para las familias que los acogen en los campamentos de refugiados.
Martín ha explicado que junto a ella, también ha sido repatriado a España Jorge Jiménez, un joven de Campo de Criptana (Ciudad Real) y ambos hacía 20 días que se habían traslado a Ausserd, en la región de Oued Eddahab-La Güera, al sur del Sahara, para impartir clases a los niños.
Ambos tenían previsto permanecer tres meses en los campamentos de refugiados atendiendo la invitación realizada por el Ministerio de Educación Saharaui para dar clases de inglés, francés, castellano y música.
Junto a los dos ciudadrealeños, también han viajado a España otros ochos cooperantes de Jaén, León, Cádiz, Pontevedra, Ourense, Pontevedra y Madrid que participaban en este mismo proyecto educativo.
Además, ha señalado Martín, debido a las medidas de seguridad adoptadas por el Ministerio de Asuntos Exteriores, también estaban siendo repatriados otros cooperantes españoles y occidentales de organizaciones como Cruz Roja o Acnur.
«El miedo a que se pueda repetir una situación de secuestros similares a la vivida en julio y noviembre del año pasado con cooperantes españoles y occidentales es lo que ha llevado al Ministerio a enviarnos para casa», ha dicho.
Los cooperantes ciudadrealeños, que partieron el pasado día 12 de enero, tenían previsto permanecer tres meses en el Sahara, dónde hasta ahora, ha dicho Cristina Martín, «no se había notado ninguna situación rara, ni detectado que pudiera haber peligro».
Por ahora, ha dicho, no tienen previsto volver de forma inmediata, aunque, ha reseñado que les han comunicado que esperen unos veinte días para ver si es posible regresar.
«A mí me gustaría volver y poder continuar con el proyecto», ha comentado la cooperante española, quien no dudaría en viajar hasta los campos de refugiados de nuevo.