Indra ha probado en Ciudad Real un andador inteligente para facilitar la movilidad de las personas mayores. Concretamente las pruebas de validación del prototipo se ha realizado con éxito con ancianos de la residencia Nuestra Señora del Carmen de Ciudad Real.
La tecnología se ha puesto al servicio de un andador para personas mayores con lo que se ha conseguido que tengan mayor autonomía en sus recorridos y paseos fuera de su entorno conocido. Además, les avisa de posibles situaciones peligrosas como obstáculos o congestiones de gente y guiarles para evitar esos peligrosos, sin que el usuario pierda el control.
A ello se suma la cámara que lleva implantada y con la que se analiza las facciones de la persona mayor para determinar el estado de ánimo en el que se encuentra. Si detecta signos de tristeza o cansancio, se detiene la ruta y el andador «pregunta» al usuario si necesita descanso o ayuda «con el fin de poder redirigirlo al lugar o al pesonal de asistencia más cercano».
Los ancianos de la residencia Ciudad de Matrimonios Ancianos Nuestra Señora del Carmen, ubicada en Ciudad Real y dependiente de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha, han sido los primeros en probar de la mano de Indra un prototipo de dicho andador inteligente.
El prototipo ha sido desarrollado en el marco del proyecto europeo de I+D+i Dali (Devices for Assisted Living). Además de realizar el piloto, Indra ha coordinado la integración los diferentes sistemas que forman el prototipo, como cámaras y sensores, que ayudan a cubrir las deficiencias o problemas que presentan en sus sentidos los usuarios. La plataforma emplea, además, múltiples formas de interactuación, visual, auditiva o mediante vibración, para intentar cubrir todo el rango de necesidades de los usuarios.
UNA AYUDA PARA MOVERSE POR HOSPITALES, AEROPUERTOS…
El andador se convertirá en una ayuda esencial al permitir la navegación en exteriores y en centros comerciales, ayudando por ejemplo a los mayores en la búsqueda de productos; en grandes hospitales, para dirigirlos hacia su consulta; y en aeropuertos o estaciones de tren, para llevarles a su puerta de embarque. Al detectar el movimiento, también podría utilizarse en rehabilitación y salud ocupacional.
La residencia Nuestra Señora del Carmen ha sido elegida por Indra para el piloto en España «debido a que los residentes se alojan en ella por parejas cuando uno de los cónyuges presenta problemas de autonomía. Los mayores han colaborado tanto en la toma inicial de requisitos, con el fin de que la solución se adaptara a sus necesidades reales, como en la validación del prototipo», informan en nota de prensa desde Indra.
En las pruebas realizadas, «22 personas mayores con problemas de movilidad o con dificultades sensoriales y/o cognitivas moderadas han utilizado el andador para guiarse a través de un entorno que simulaba un centro comercial. El resultado de la validación ha sido muy positivo, al facilitar información muy valiosa para el ajuste final del prototipo y conseguir un grado de satisfacción muy elevado por parte de los usuarios».
En el marco del proyecto también se están realizando pruebas de validación similares en Italia y Reino Unido, con el fin de comprobar los resultados y los diseños independientemente del entorno y las condiciones culturales.
El proyecto Dali, financiado por la Comisión Europea a través del VII Programa Marco (EC Grant Agreement n.288917), está coordinado por la Universidad de Trento y finaliza este año. Indra ha sido el miembro líder en la integración del prototipo y responsable de la interfaz visual y han participado también en el consorcio la empresa española Visual Tools, la Universidad de Siena, la entidad francesa Inria, el grupo de investigación griego Forth, la Universidad de Northumbria y Siemens.