El Pleno ordinario del Ayuntamiento de Toledo ha aprobado la modificación de las ordenanzas fiscales para el 2013, que suponen una subida del 2,7 por 100, correspondiente al IPC de agosto, que el PP, en el caso de basuras y del IBI, ha tachado de «desorbitadas y desmesuradas».
Con los votos en contra del PP y la abstención de IU, el debate por espacio de hora y media de los nuevos precios de las tasas fiscales se ha centrado en el incremento de la tasa de basuras y en el del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que no han puesto de acuerdo a ninguno de los tres grupos municipales, y después de relatar los nuevos precios la edil de Hacienda, Paloma Heredero.
El portavoz de IU, Aurelio San Emeterio, ha argumentado que al «desastre» en las políticas del PP, por ser contrario al Plan de Ajuste impuesto por el Gobierno estatal, se suma la lamentable «gestión» del equipo de Gobierno, con el que no ha estado de acuerdo «ni en los gastos», con la valla de Fedeto (12.000 euros) o la ayuda a reparar tejados de iglesias, «ni en los ingresos», por las pérdidas en la Alhóndiga o con el tanatorio.
San Emeterio ha justificado el no votar en contra porque «se ha tenido en cuenta la exigencia que le hicimos», en una de las escasas enmiendas que ha tenido en cuenta el PSOE, de que fuera gratis el transporte público para los desempleados.
Ha lamentado, no obstante, que no se hayan tenido en cuenta tasas para extinción de incendios o por uso de edificios religiosos, aunque se ha congratulado de que sí estén contempladas, entre otras, las de tenencia de animales o utilización de dominios públicos.
«Hay que pagar impuestos, pero le aconsejo (PSOE) que se ponga junto a la ciudadanía y no se esconda», ha criticado Emeterio.
Los argumentos del Grupo Municipal Popular, para no sumarse a dar el sí a los nuevos precios públicos, según José López Gamarra, han sido que la subida real del IBI es del 10 por 100, para un total del 51 por 100 «desde que gobierna Emiliano García-Page», o que la tasa de residuos sólidos se convierte de las más caras de España.
Ha citado el incremento del 4 por 100 en Instalaciones, Construcciones y Obras o el 50 por 100 en la de alcantarillado cuando bastaría «con un 25 por 100», para solicitar una bonificación del 50 por 100 en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) para los «parados de larga duración».
López Gamarra, que tampoco ha olvidado el impuesto de viviendas, ofreciendo datos de diferentes viviendas y sus subidas, que en ningún caso bajan del 8 por 100, ha resumido que el alcalde «pasará a la historia por ser el más carero de toda la historia» de la ciudad.
«Son injustas e insolidarias», ha reseñado el viceportavoz popular, «son tasas desorbitadas y desmesuradas», que ha apoyado, en su segundo turno, con la lectura de las opiniones de las diferentes asociaciones vecinales de la capital.
En defensa de la subida de las diferentes tasas, el portavoz municipal, Rafael Perezagua, ha sostenido que destacan «por su moderación» y que «lo más importante es que garantizan los servicios públicos» que dependen del Ayuntamiento y «no afectan al empleo».
«Estas ordenanzas cumplen con el Plan de Ajuste», ha añadido Perezagua, «se sube sólo el IPC salvo el alcantarillado» con el fin de ajustarse «al coste real del servicio que se presta», además de dejar claro que el IBI «se congela», pero que la deriva viene dada por el coeficiente en ampliar el tipo de gravamen, que se mantiene en el 0,42 por 100 y que el PP ha pedido que se baje al 0,40 U por 100.