El departamento de Ciencias Sociosanitarias y Medicina Legal de la Universidad de Murcia realizó una encuesta en 2013 a 425 internos varones de las cárceles de Albacete, Cuenca, Ocaña 1 y Ocaña 2 con el objetivo de conocer si existe alguna relación entre el consumo de sustancias ilegales y la victimización dentro de los centros penitenciarios. La revista científica Gaceta Sanitaria ha dado a conocer los resultados.
El 58,8 por 100 de los presos de Castilla-La Mancha había consumido algún tipo de droga en el último mes y un 55,3 por 100 había sido víctima de algún tipo de agresión en prisión. Estos son algunos de los datos que recoge el estudio de la Universidad de Murcia que observa una asociación entre la violencia y el consumo de drogas.
En cuanto a las drogas más consumidas, cuatro de cada 10 internos manifestó haber consumido cannabis en el último mes. Le siguen el alcohol (37,1 por 100), la cocaína (28 por 100), los psicotrópicos sin prescripción (17,9 por 100), la heroína (14,6 por 100) y el crack (12,7 por 100).
En cuanto a las agresiones, las más frecuentes son las verbales. En este sentido, el 41,4 por 100 de los presos había recibido algún insulto en el último mes. El 30,6 por 100 reconocía haber sido víctima de robo, el 29,2 por 100 declaraba haber sufrido amenazas y el 28,8 por 100 confesaba haber sido objeto de algún tipo de agresión física. El 7,8 por 100 ha sufrido agresión sexual.
Las conclusiones del estudio reflejan que los consumidores de cannabis y de psicotrópicos sin prescripción médica presentan mayor riesgo de ser víctimas de agresión sexual, mientras que el resto de los tipos de violencia también la relacionan directamente con el consumo de otras sustancias.