El Colegio Oficial de Médicos de Toledo ha reclamado a la administración regional mayor implicación para evitar casos de violencia en los centros sanitarios, como las agresiones físicas y verbales que han sufrido en los últimos días facultativos de Toledo y Talavera de la Reina.
El secretario general del Colegio de Médicos de Toledo, el doctor Juan José García, ha destacado en rueda de prensa que los hechos que tuvieron lugar el pasado 1 de noviembre en el Hospital Nuestra Señora del Prado de Talavera, donde resultaron heridos un vigilante de seguridad y una doctora, «fueron gravísimos».
En este sentido ha tachado de «muy blanda» la respuesta de la administración regional porque el consejero de Sanidad, José Ignacio Echániz, anunció que se iban a poner en marcha distintas medidas para evitar este tipo de incidentes, pero, según García, «no sabemos cuáles».
«Echániz aseguró que la gerencia del Hospital de Talavera se iba a personar en las diligencias penales», ha recordado, «pero no hemos oído manifestarse al respecto al director gerente ni al secretario general del Sescam, cuando el ‘Plan Perseo’ es responsabilidad de la secretaría general.
Desde el Colegio Oficial de Médicos de Toledo han pedido a la administración que «tome cartas en el asunto» y que el Sescam ponga en marcha planes de autoprotección para enseñar al personal sanitario a manejar situaciones de riesgo.
A juicio de su secretario general, «es fundamental identificar los servicios donde el riesgo es mayor para poner cámaras y vigilantes de seguridad, así como habilitar el botón del pánico».
Para García, la «batalla campal» que hubo el pasado día 1 en el hospital de Talavera supone «un fracaso institucional y corporativo, aunque quien más responsabilidad tiene es la administración pública».
En su opinión, «hay una relación directa entre la política de recortes que se están produciendo en el ámbito sanitario y el incremento de acciones violentas», ya que «tanto las agresiones físicas como verbales están aumentando en los últimos meses».
En este sentido, ha señalado que el 65 por ciento de las agresiones se producen en atención primaria y el 35 por ciento en atención especializada y que a partir del año 2012 ha aumentado el porcentaje de agresión a las mujeres en el ámbito sanitario, si bien, «sólo se denuncia en torno a un 50 por ciento de los casos».
«No se puede justificar la violencia», ha indicado el doctor, tenemos que atajarla con sentencias justas y penas proporcionales a la falta o al delito cometido, aunque eso conlleve la cárcel».
También ha recordado que el Colegio Oficial de Médicos de Toledo ofrece asesoría jurídica a los afectados y se persona como acusación particular siempre que se produzca un caso como el del pasado 1 de noviembre en Talavera.
Un suceso que se saldó con la detención de dos hombres y dos mujeres de etnia gitana por su agresión a dos facultativas y otros trabajadores del hospital en medio de una pelea en la que llegaron a sacar armas blancas.
Finalmente, el secretario general del Colegio de Médicos de Toledo ha enviado un mensaje de tranquilidad a la población porque «buscamos curar a la gente», ha afirmado, «y no podemos trabajar en un entorno de batalla».
Por su parte, el gerente del Hospital de Talavera, José Luis Morillo, se ha ratificado en la denuncia interpuesta contra los agresores mostrando «su total apoyo al personal agredido» y ha asegurado que en el Hospital «se continúa trabajando con normalidad».