El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, ha aseverado hoy que las urgencias del Hospital de Toledo tuvieron el martes un «evento puntual» y que, a partir de ese momento, han funcionado con una «trayectoria normal».
En declaraciones a los medios de comunicación, Fernández Sanz ha comentado la carta que un grupo de facultativos del Servicio de Urgencias del Complejo Hospitalario de Toledo (CHT) enviaron el martes 10 de enero al juzgado de guardia para informar sobre el «colapso del servicio» y alertar del «grave riesgo» que esta situación conlleva para el paciente.
El consejero de Sanidad, que ha mostrado su respaldo a la dirección del centro hospitalario a pesar de que varias organizaciones han pedido la dimisión, ha considerado que el juzgado de guardia «no es el sitio adecuado donde ir» para abordar este tipo de asuntos, aunque ha afirmado que la Consejería de Sanidad responderá a lo que pidan los facultativos, «como no puede ser de otra manera».
En cualquier caso, ha incidido en que «los servicios de urgencias están funcionando bien» y ha recordado que Castilla-La Mancha es una de las tres comunidades autónomas que tiene un Plan Preventivo para la Hiperfrecuentación, «de gripe o lo que corresponda» y que este plan, activado a nivel regional, «está individualizado en cada centro».
Así, ha defendido que el Hospital de Toledo «lo puso en marcha oportunamente» y ha resaltado que la situación que se vivió el martes 10 de enero es un «evento puntual» que se ha superado.