El Gobierno de Castilla-La Mancha y la Universidad de Alcalá de Henares tienen previsto firmar un convenio de colaboración para realizar estudios que prueben la posibilidad de utilizar el vinagre de madera como herbicida alternativo y menos dañino que el glifosato. Este acuerdo de colaboración ha sido contado hoy en el pleno de las Cortes por la diputada socialista Carmen Torralba, que ha intervenido para exponer la postura de su grupo ante la Proposición No de Ley presentada por Podemos relativa a los herbicidas químicos, y que ha sido rechazada con los 31 votos en contra de PP y PSOE.
Torralba ha explicado que, gracias a esta colaboración, se podrá estudiar si el vinagre de madera puede ser utilizado en Castilla-La Mancha como alternativa al glifosato, pues se ha demostrado su efectividad en otras zonas del mundo, pero con climas y condiciones medioambientales distintas.
Y ha adelantado que, si los resultados del estudio son positivos, se tiene la intención de crear una patente conjunta entre Castilla-La Mancha y la Universidad de Alcalá para difundir esta alternativa.
«Primero hay que probar y después aprobar», ha dicho Torralba a Podemos, a quienes ha criticado que hayan propuesto la prohibición del uso del glifosato sin ofrecer alternativas, pues ha comentado que en otras administraciones como el Ayuntamiento de Madrid, se ha acordado su supresión pero «de forma progresiva y tras un estudio exhaustivo».
LA PNL DE PODEMOS
En concreto, la PNL presentada por Podemos instaba al Gobierno regional a que la Junta de Comunidades se responsabilice de la protección de la salud de los castellanomanchegos y de su patrimonio natural prohibiendo la aplicación de herbicidas químicos para todos los usos no agrarios en los espacios de uso público, carreteras o redes de servicio en toda la región.
También ha solicitado que esta práctica sea sustituida por métodos no químicos, que no dañen la salud ni el medio ambiente, como por ejemplo los métodos mecánicos, térmicos y de pastoreo que se aplican en la mayoría de los países de la Unión Europea y que tienen un mayor potencial de generación de empleo.
Además, ha planteado que se tomen las medidas oportunas para sensibilizar e informar a la población de los riesgos para la salud y el medio ambiente que supone el uso de herbicidas químicos también en los usos agrarios para fomentar una reducción de su uso agrario.
Sobre este asunto, el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Francisco Martínez Arroyo, que ha intervenido desde su escaño, ha afirmado que comparte la preocupación manifestada en la PNL por la salud de los ciudadanos y el medio ambiente, aunque ha apostado por «hacer caso de los organismos científicos, que pueden aportar soluciones».
También se ha mostrado partidario de ser «muy prudentes» a la hora de tratar el uso o prohibición del glifosato, para «no perjudicar a la agricultura», por ser un herbicida usado en los cultivos.
Con todo, ha valorado la PNL como «un punto de partida para trabajar en una dirección», siempre y cuando se tengan en cuenta los informes de los organismos internacionales y se garantice que el sector agrario tenga herramientas para su actividad y el medio ambiente.
LLORENTE: «HAY INFORMES DE ORGANISMOS INTERNACIONALES»
En cambio, el portavoz de Podemos en las Cortes, David Llorente, ha señalado que existen informes de organismos internacionales que advierten del riesgo del uso del glifosato para la salud y el medio ambiente.
Por ello, ha propuesto que se prohíba este herbicida y se aplique el principio de cautela, que «protege los intereses de los consumidores y del medio ambiente», sobre todo si se tiene en cuenta que «hay alternativas no tóxicas y más respetuosas» con la naturaleza.
De hecho, ha aseverado que hay comunidades autónomas y países que rechazan el uso del glifosato con «una gestión pública más responsable del medio ambiente y la salud», por lo que ha pedido que Castilla-La Mancha «no quede fuera de este modelo de gestión».
Por su parte, el portavoz del PP en las Cortes de Castilla-La Mancha, Francisco Cañizares, ha propuesto plantear el debate sobre el uso del glifosato «con una seriedad extraordinaria», con «rigurosidad y con respeto a los miles de agricultores» que lo utilizan en la región.
En este sentido, ha adelantado que el PP va a apoyar al Gobierno regional en las decisiones que tome sobre este asunto porque «lo más importante es la salud», pero ha insistido en la necesidad de estudiar el tema «con seriedad y sin alarmismos».