El nuevo director del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, Francisco Marí, plantea la posibilidad de admitir a pacientes de otras patologías de tipo neurológico como puede ser el daño cerebral para «optimizar los recursos» del centro sanitario, que es referencia nacional en lesiones medulares. Así lo pone de manifiesto en un comunicado remitido hoy por el Gobierno regional el nuevo responsable del hospital de Parapléjicos de Toledo, un economista experto en gestión hospitalaria, nacido en Ibiza hace 44 años.
Para captar actividad», Marí planteará en los próximos meses y en sintonía con los profesionales, la posibilidad de admitir ingresos de otras patologías de tipo neurológico, como por ejemplo daño cerebral y ello «sin duplicar servicios» que ya existan en la comunidad autónoma, afirma el responsable sanitario.
Por tanto, se analizará cuál es el «encaje que puede tener el hospital en un futuro, tanto en Castilla-La Mancha como por su condición de centro de referencia nacional».
Asimismo, la optimización de recursos también se extiende a las infraestructuras tecnológicas como la resonancia magnética de 3T con la que cuenta Parapléjicos, hospital que dispone del único equipamiento de este tipo en la comunidad, «que debe estar en funcionamiento el mayor número de horas posibles».
En este sentido, además del uso al que se le destinó, investigación y pacientes con daño neuronal, «estamos abiertos a los pacientes que el sistema de salud nos pueda derivar para su diagnostico», ha afirmado Marí.
Asimismo, los responsables de Parapléjicos valorarán el impacto que tiene para el centro el hecho de que algunas comunidades autónomas no estén enviando pacientes, a pesar de que el Ministerio de Sanidad le ha reconocido como centro de referencia nacional para el tratamiento de las lesiones medulares.
Francisco Marí quiere poner el acento en la investigación a través de «un modelo que la haga sostenible y que esté basado en la aplicación clínica del conocimiento, el desarrollo de patentes y la relación con la industria farmacéutica».
También quiere que la crisis no afecte al funcionamiento del centro, que no es ajeno a las circunstancias y a la actual realidad económica, afirma Marí, partidario de realizar no sólo los ajustes imprescindibles para que el hospital sea sostenible, sino también captar actividad y en este sentido se enmarca la posible atención de otro tipo de pacientes.
En alusión a las reivindicaciones de la Plataforma para el Futuro del Hospital Nacional de Parapléjicos relacionadas con los recortes, el gerente se ha reunido hace unos días con 13 representantes de usuarios y profesionales.
En dicho encuentro el director les transmitió la convicción de que «el hospital, al margen de que tenga que ajustarse a nuevos escenarios, debe salir reforzado y garantizar su continuidad».
Y como respuesta a ello todas las partes expresaron su disposición a «remangarse por el futuro del centro», se afirma en el comunicado remitido por el Gobierno regional.
Marí llega a Toledo con el encargo del Sescam de reforzar este centro, para lo cual considera que «la participación, imaginación y trabajo en equipo de los profesionales serán las claves para mantener la excelencia y el reconocimiento nacional e internacional de Parapléjicos».
El nuevo director del Hospital Nacional de Parapléjicos también toma el mando de la Fundación para la Investigación y la Integración, sin perder de vista al paciente como eje central del quehacer de la institución.