La reducción de las listas de espera es el tema más urgente a abordar para el nuevo gerente del Área de Salud Integrada de Cuenca, Francisco Javier Godoy, quien también va a apostar por el diálogo con los profesionales del área.
Godoy, que ha participado en la dirección de varios hospitales de la región, ha hecho estas declaraciones a los periodistas en su presentación en el Hospital Virgen de la Luz de Cuenca.
Ha dicho que es un reto profesional estar en este proyecto y que intentará aportar su experiencia de 30 años en el sistema público de salud y ha pedido colaboración a todos los profesionales para seguir mejorando la sanidad pública y la atención a los pacientes.
En este sentido, ha asegurado que es necesario un entendimiento, y que «si nos perdemos en luchas entre unos y otros no avanzaremos».
Ha añadido que trabajará para integrar las áreas de Primaria y Especializada y ha abogado por «pelear para tener controladas las listas de espera y dar la mejor respuesta en cada caso».
Listas que según el antecesor de Godoy, Rodolfo Antuña, están dentro de los parámetros marcados por el Sescam.
«En el área de Cuenca las listas de espera quirúrgica prácticamente en su totalidad están dentro del objetivo institucional. Para aquella que no lo está, la de Traumatología, hay una aportación económica para solucionarla» ha dicho Antuña.
El exgerente ha asegurado que en vacaciones las listas de espera se incrementan, pero pueden variar a partir de septiembre y siempre dentro de los «parámetros habituales».
MÁS DE 15 MILLONES
El secretario general del Sescam, Fernando Sanz, ha recordado que el Gobierno regional va a destinar 15 millones de euros a un plan para reducir las listas de espera.
A preguntas sobre los conflictos que ha mantenido durante estos dos años con colectivos sanitarios del Hospital Virgen de la Luz, como la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública o la Junta de Personal, Rodolfo Antuña ha señalado que siempre hay cosas que se pueden hacer mejor.
«Lo más prudente es corregir y todos nos equivocamos, yo el primero, y naturalmente que hay cosas que si se vuelven a hacer lo inteligente es hacerlas de otra manera», aunque no ha detallado cuáles, y ha manifestado que «cada uno hace sus reflexiones y va valorando sobre la marcha. Serían unas cuantas, sin duda».
Sin embargo, ha defendido que ha sido «un lujo» trabajar en Cuenca durante estos dos años y ha señalado que no se habrían podido conseguir los objetivos sin el trabajo de un «buenísimo» equipo de dirección y de los profesionales sanitarios.
El pasado mes de febrero la Junta de Personal presentó una demanda penal contra Antuña por presuntos delitos contra los derechos de los trabajadores y prevaricación, que aún está en proceso judicial.
Preguntado por el cierre de plantas en el Virgen de la Luz, el gerente saliente ha defendido que este hospital está perfectamente preparado para abrir las camas necesarias en caso de que se requieran.
Ha dicho que este año no ha habido terceras camas, mientras que el verano pasado hubo tres, y ha recordado que intentan ser «lo más eficientes posible».
Según datos de la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública, durante la gestión de Antuña el Hospital Virgen de la Luz ha pasado de 411 camas abiertas a 231.