Se han mostrado muy críticos con el nuevo trasvase aprobado por el Gobierno nacional. El PSOE de Castilla-La Mancha entiende que es «una temeridad que Cospedal debería haber votado en contra para ahora poder recurrirlo».
Quien así se ha expresado es Antonio Luego, secretario de Agua de la Ejecutiva regional del PSOE, quien ha insistido en que no tiene ninguna lógica trasvasar casi 102 hectómetros cúbicos desde la cabecera del Tajo hasta el Levante para los próximos tres meses, «cuando los pantanos del Tajo están en una situación dramática, al 23 por 100 de su capacidad de agua embalsada, y la línea roja ha sido sobrepasada ampliamente».
De ahí que Luengo se haya preguntado «cuál ha sido la posición de la presidenta de Castilla-La Mancha en la Comisión de Explotación que ha decidido el trasvase, si ha votado a favor o en contra».
Le ha pedido al Gobierno de la región que recurra la decisión «no sólo porque pueda ser ilegal, sino como gesto político para dejar claro que en esta tierra no estamos de acuerdo con este trasvase y con la manera en la que se ha venido gestionando».
Luengo ha recalcado que es el propio Gobierno autonómico «quien tiene la obligación de trabajar por cambiar una ley, la del trasvase, que está en vigor desde hace más de 30 años y que sólo ha servido para esquilmar al río Tajo en beneficio del Levante».