El PSOE duda que las obras del nuevo Hospital de Toledo empiecen en enero de 2015, sino que no lo harán como muy pronto hasta abril si se cumplen los plazos establecidos por la ley, según ha afirmado hoy el portavoz de Sanidad del grupo socialista en las Cortes regionales, Fernando Mora.
En rueda de prensa, Mora ha cuestionado que las obras se reinicien a principios de 2015, como indicó el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz, después de que el Consejo de Gobierno aprobara ayer los pliegos para la construcción del nuevo centro hospitalario.
Mora ha advertido que «salvo que se salten los calendarios a los que obliga la ley», las obras no empezarán en enero de 2015, sino que «como muy pronto y siempre que acorten los plazos» se puede hablar de finales de abril y principios de mayo y si los plazos se llevan al máximo en el mes de julio del próximo año.
Es un proceso largo que incluye la redacción del proyecto, «salvo que el que lo tenga adjudicado ya lo tenga redactado», pero si no como muy pronto el comienzo será en abril o mayo, ha insistido Mora, quien ha opinado: «esto lo sacan para colocar una grúa que de vueltas por allí, para que parezca que han reanudado la obra».
Ha recordado que el Gobierno regional primero anunció que las obras iban a empezar a principios de 2013, después a principios de 2014 y que la propia presidenta María Dolores de Cospedal dijo que antes de que finalizara la legislatura el hospital iba a estar acabado, cuando ahora «ya ni siquiera contemplan esa posibilidad», ha añadido.
En este sentido, Mora ha asegurado que, si hubiera querido, el Gobierno regional podría haber reanudado las obras nada más comenzar su gestión, pero no le ha interesado porque en el fondo lo que subyace es su determinación de imponer un nuevo modelo de gestión sanitaria.
Según Mora, podrían haber negociando con las empresas que conformaban la UTE que construía el hospital, haciendo un modificado a la baja, si es lo que querían y renegociando el crédito con el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
«El problema es que les molestaba esa obra, porque no la habían iniciado ellos, querían darle otro sesgo» y poner en marcha el modelo público-privado, que implica la concesión por 30 años de servicios a una empresa que tendrá en este periodo «más de 600 millones de beneficios netos», ha aseverado Mora, para quien esta cifra «es una barbaridad».
Mora también ha comentado que es «una incógnita» de dónde saldrá la financiación para las obras, ya que el crédito que anunció Echániz el pasado año del BEI «no aparece por ningún sitio», ya que en la entidad financiera el único que aparece reflejado es el que en su día se dio al que presentó el anterior Gobierno del PSOE.
En este contexto, ha insistido en su consideración de que detrás de todo este asunto está la pretensión de cambiar el modelo de gestión sanitaria, no un problema generado por la crisis económica y por los impagos a las constructoras, ya que las certificaciones se iban pagando salvo cuando había discrepancias con las empresas.
De hecho, el Gobierno regional ya no hablan de «obra faraónica» y en las sucesivas informaciones ha ido aumentando el número de camas que tendrá el hospital, de forma que de las 580 de las que hablaba al principio, pasaron a hablar de 678, hace unos días a 744 y ahora Echániz dice que serán 760, ha apuntado Mora, quien ha señalado: «ya solo quedan 48» para llegar a las previstas en el proyecto inicial.
Además, ha asegurado que el PSOE no quiere poner «palos en las ruedas» al proyecto y ha criticado la «incapacidad absoluta» para gestionar del Gobierno regional, «porque quieren imponer un modelo que tienen en la cabeza».