El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) ha asegurado que garantiza la asistencia sanitaria en los meses de julio, agosto y septiembre y que «entre el 80 y el 90 por 100 de las camas permanecerán abiertas» en los hospitales de la región. Además, ha destacado que «este año se cerrarán 300 camas menos que el año pasado».
El Sescam ha querido «tranquilizar a los ciudadanos» con este anuncio, añadiendo que «durante los meses estivales es una práctica habitual en todos los centros de nuestro país mantener sólo los recursos necesarios teniendo en cuenta la disminución de la demanda».
Por último, el Servicio de Salud castellano-manchego ha manifestado que «el número de camas en los centros hospitalarios debe adaptarse, en cualquier época del año, a las necesidades reales de la población» y que «en caso de ser preciso, se contaría con las camas que fueran necesarias».