«Nos quieren convertir en una colonia hídrica del Levante y en Castilla-La Mancha no hacemos nada. Porque en el Levante está en una ofensiva total para impedir que el Tajo mantenga su nivel de agua y que pueda trasvasarse todo el agua al Levante. Y ahora se descuelgan con que quieren un trasvase del Tajo medio, quieren sacar el agua limpia de las cabeceras de Entrepeñas y Buendía y dejar al Tajo convertido en una auténtica cloaca, que se alimente sólo con el agua de Madrid, del Jarama, un agua deteriorada que no sirve ni para consumo ni para uso industrial».
El secretario de Agua de la Ejecutiva del PSOE de Castilla-La Mancha, Antonio Luengo, también alcalde de Villalba del Rey (Cuenca) y presidente de la Asociación de Municipios Ribereños de los embalses de Entrepeñas y Buendía, ha pintado este oscuro panorama para el Tajo a su paso por la comunidad autónoma, agravado, según ha insistido durante la rueda de prensa, en que «María Dolores de Cospedal y su Gobierno están más preocupados en los problemas que tiene en la Audiencia Nacional, problemas cuanto menos dudosos. Está en una situación de agobio y cerco judicial y el agua es una cuestión de un nivel muy inferior al agobio del caso Bárcenas. Están más pendiente de esas aguas embarradas, más sucias, que de defender que en Castilla-La Mancha tengamos agua limpia».
Luengo ha calificado la situación de «grave, sobre todo por la inanición y la falta de actuación del Gobierno de Castilla-La Mancha. Mientras que en el Levante todos están por el mantenimiento del trasvase e incluso ya han llegado a pedir una gestión conjunta, porque se quieren llevar el agua sin ningún problema ni cortapisa».
PIDE UNA REUNIÓN URGENTE DE LA MESA DEL AGUA DE CASTILLA-LA MANCHA
Luengo ha pedido públicamente que se reúna, «de forma urgente, la Mesa del Agua de Castilla-La Mancha para defender los intereses de la comunidad autónoma, pero parece que hay otros intereses más espúreos de la presidenta de la región. Cospedal tiene que plantear de forma clara cuál es su idea para el agua de Castilla-La Mancha, porque puede ocurrir que lo que dice el Plan Hidrológico se pueda quedar en agua de borrajas. Ni siquiera la han llamado para estar presentes en las reuniones del memorándum en el Levante, que han realizado casi con nocturnidad y alevosía».
Y ha matizado cuál será la línea argumental de las alegaciones que el PSOE de CLM va a presentar al borrador del Plan de Cuenca del Tajo, cuya fecha límite para hacerlo es el 20 de septiembre, «el Tajo tiene que servir para que sea un río medioambientalmente sostenible, no puede ser una cloaca de Madrid ni un charco de patos en Talavera; ha de tener un caudal ecológico que ha de ser asumible, por encima de 11 metros cúbicos por segundo en Aranjuez y de 14 en Toledo y Talavera… Así haremos el río que todos queremos. Y tiene que servir para el desarrollo turístico de la comunidad autónoma».
Aunque se ha mostrado pesimista sobre las citadas alegaciones y el caso que les hagan, «siento mucho decir que no somos optimistas, porque pensamos que ni el Gobierno de Castilla-La Mancha va a hacer nada a favor de lo que proponemos ni el Gobierno de España tampoco, porque parece que los intereses de la cuenca del Tajo decaen por los intereses de otras regiones. De ahí que nuestro horizonte sea Bruselas, la Comisión Europea, que es donde tienen que ver que con este borrador del Plan de Cuenca del Tajo estamos destrozando el río».