La sequía y la proliferación de algas acabaron con el oxígeno de una charca donde los Agentes Medioambientales encontraron nada menos que 200 carpas muertas. Sucedió hace unos días en Mora (Toledo).
Unas 200 carpas se encontraron muertas los Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha en una charca de Mora (Toledo), a la orilla de la autovía. Sucedió hace unos días y la muerte de todos estos peces se debió a la eutrofización.
O, lo que es lo mismo, baja el nivel de agua debido a la sequía y se generan algas que consumen todo el oxígeno, por lo que las carpas fallecieron una tras otra.
Fue un Agente Medioambiental quien lo descubrió y quien procedió a recoger muestras para que fueran analizadas y confirmar así la causa de la muerte de los peces, con el fin de descartar que pudiera haber otro motivo.
Un agente medioambiental coge muestras para determinar por qué murieron las carpas.