La Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) espera poder empezar a construir a finales de 2014 la «parte nuclear» del Almacén Temporal Centralizado (ATC) que se construirá en Villar de Cañas (Cuenca) de forma que, a últimos del año 2017, pudiera estar operativo.
Fechas que ha adelantado hoy a los periodistas el presidente de Enresa, Francisco Gil-Ortega, en Maliaño (Cantabria) antes de la reunión del «cluster» de la Industria Nuclear de Cantabria, que se ha celebrado en la factoría de Equipos Nucleares (ENSA).
Gil-Ortega ha afirmado que la voluntad de Enresa es cumplir los plazos y ha indicado que, en estos momentos, se están realizando los proyectos para hacer los accesos y para la instalación de un vivero de empresas en la zona.
Ha explicado que ya están adjudicados los proyectos correspondientes a las ingenierías principales relacionadas con el ATC y que esperan poder presentar en el mes de julio la información y documentación pertinente para el estudio de impacto ambiental.
El presidente de Enresa ha señalado, además, que a finales de este año tienen previsto preparar los concursos necesarios para ir adjudicando, a lo largo de 2014, es decir, el año que viene, los diferentes proyectos que permitan iniciar la construcción de la parte nuclear, la que sirva para almacenar los residuos nucleares, a finales de ese mismo año.
Según ha recordado Gil-Ortega, el ATC es el primer y único almacén de residuos nucleares de España y será «uno de los más importantes» de Europa y del mundo, que supondrá una inversión de 1.200 millones de euros, de los que casi el 50 por ciento, ha dicho, es para materiales y equipo