El proyecto ha consistido en unir los senderos urbanos y periurbanos de la ciudad para crear una red de puntos de interés para el visitante, prestando especial atención y cuidado a la señalización de los caminos y sendas.
Cuenca cuenta con un nuevo producto turístico: la red de itinerarios de senderismo «Flor de senderos» que han presentado la concejala de Turismo, Nieves Mohorte, y el gerente de la empresa «itineraria», Adolfo Bállega.
El proyecto «Flor de senderos» ha consistido en unir los senderos urbanos y periurbanos de la ciudad de Cuenca para crear una red de puntos de interés histórico y paisajístico en torno al Casco Histórico, prestando una especial atención a la señalización de los mismos para que sea sencilla, efectiva y de calidad. Se trata además de una señalización homologada por la Federación de Deportes de Montaña de Castilla-La Mancha.
En total se ofrecen tres itinerarios en torno a la ciudad de Cuenca, todos ellos para realizar a pie y de una dificultad media, por lo que está al alcance de cualquier persona.
Mohorte ha destacado la importancia de que la ciudad Cuenca, que basa buena parte de su actividad económica en el turismo, apueste por la creación de nuevos productos que atraigan a los visitantes y animen a alargar la estancia.
La concejala de Turismo ha recordado que, además de la riqueza patrimonial y la cultura, el entorno natural es uno de los principales atractivos de Cuenca como destino turístico y ha señalado que cada vez son más los visitantes que se interesan por realizar recorridos por la naturaleza como los que ofrece «Flor de Senderos», además de practicar deporte en el medio natural.
Por su parte, el gerente de la empresa «Itineraria» ha explicado que, gracias a este proyecto, se ha recuperado parte del conocido sendero GR66 que atraviesa la provincia de Cuenca pasando por la capital. Concretamente, se han señalizado cinco kilómetros. A través de este sendero, denominado «de los miradores», pues une el Mirador del Rey, un nuevo mirador que se ha realizado a mitad de ladera del Cerro de San Cristóbal, con los miradores de Rincón Seco y el del Sagrado Corazón. De esta manera, se ofrecen unas vistas inmejorables de Cuenca.
Por otra parte, se ha señalizado el sendero SL10 que bordea la ciudad histórica, visitando las hoces de los ríos Júcar y Huécar, subiendo hasta el Castillo y descendiendo por las Angustias. Se trata de un recorrido circular de unas dos horas de duración, que alterna zonas urbanas con caminos tradicionales.
Finalmente, el SL11 es un sendero que recorre el Recreo Peral, camino de San Julián, Mirador de Cuenca, Ermita de San Julián el Tranquilo, presa de Las Grajas, paraje de San Juan de la Rivera y la ermita de las Angustias.
«Flor de senderos» ha supuesto una inversión de 42.000 euros y se ha financiado por cargo a los fondos FOMIT que le fueron concedidos al Ayuntamiento de Cuenca en el año 2005 y que aún no se habían ejecutado en su totalidad.