El secretario regional de CCOO, José Luis Gil, ha pedido una respuesta «urgente» por parte del Gobierno para detener la «sangría laboral» y el cierre de empresas productivas que se está produciendo en Puertollano.
Gil, que ha visitado la central eléctrica de Elcogás, ha expresado en rueda de prensa su preocupación por el «declive industrial» de la comarca de Puertollano, donde en los dos últimos años se han perdido, solo en la industria, 1300 puestos de trabajo.
Hay una situación de «sangría laboral» y cierre de empresas productivas, «que requieren una respuesta proactiva y urgente por parte del Gobierno, que debiera estar acompañada de unas políticas gubernamentales a favor de las energías renovables, que ha sido el sector más afectado en los últimos dos años en Puertollano», ha afirmado el secretario general de CCOO de Castilla-La Mancha.
Ha confiado en que en la mesa del carbón, que se reunirá la semana próxima, «la voz del Gobierno de Castilla-La Mancha se haga oír en defensa de la minería de Puertollano, dado el futuro incierto que se prevé a partir de diciembre del 2014».
Espera una declaración similar a la que ha hecho el Gobierno de Castilla y León a favor de sus comarcas mineras.
«Es urgente y necesario contraponer ideas y apostar por Castilla-La Mancha a nivel industrial», ha afirmado Gil, quien ha comentado que por este motivo su sindicato ha ofrecido la posibilidad de abrir una mesa en la que «podamos abordar una política industrial que nos permita sobrevivir de cara al futuro».
A juicio de Gil, el problema específico de Puertollano merece una atención especial «porque se ha llegado a un momento preocupante en el que es necesario tomar medidas de inmediato para garantizar un futuro tranquilizador para esta comarca».
Por otra parte, ha cuestionado la Ley de Emprendedores, a la que ha calificado como «una ley de humo sin dotación presupuestaria, que ha demostrado su inutilidad, con una mayor destrucción de pymes y autónomos, elaborada de espaldas a todo y a todos».
Asimismo, ha definido al Plan de Inversión y Creación de Empleo (PICE) como «una campaña de publicidad de la Junta» sin que se conozcan de dicho plan «ni las bondades ni las maldades».
En este sentido, Gil ha criticado a la Confederación de Empresarios de Castilla-La Mancha (Cecam) por conceder un «aplauso fácil al Gobierno sin haber sido más exigente en medidas concretas que eviten la destrucción de empleo a la que asistimos en la región».