«¡El Hospital Virgen del Valle no se cierra!». La Asamblea en Defensa de la Sanidad Pública de Toledo ha trasladado su malestar por las propuestas preelectorales que quieren clausurar el Hospital Virgen del Valle para trasladarlo al Virgen de la Salud cuando esté activo el nuevo hospital que se construye en el barrio del Polígono.

«Exigimos a todas las formaciones políticas que cesen en el mercadeo y uso meramente electoralista que con sus declaraciones vienen haciendo de las infraestructuras sanitarias por un puñado de votos al anunciar traslados de hospitales sin contar con los profesionales, ni disponer de estudios ni considerar las necesidades reales de atención y demandas sanitarias de la ciudad», ha expresado en una nota de prensa sobre unas propuestas que han realizado tanto el PP local y regional como Unidas Podemos Toledo.

Reclaman «rigor» en las propuestas de infraestructuras sanitarias puesto que «la atención sanitaria es mucho más que la mera ubicación de un hospital, es un conjunto de profesionales y de recursos planificados y puestos al servicio de una estrategia de salud pública que requiere un análisis concienzudo para que realmente no peligre la capacidad de respuesta del sistema para atender a la población de forma eficaz con los recursos existentes».

Puesto que a su parecer, es «inadmisible que se esté planteando que la apertura del Hospital Universitario de Toledo suponga el cierre del Hospital Virgen del Valle, se necesita seguir creciendo en capacidad hospitalaria y recursos de atención y para ello renunciar a infraestructuras existentes no es el camino».

Cuatro razones por las que no cerrar el Virgen del Valle

Además, esbozan cuatro razones por las que creen que esta instalación se tiene que mantener en pleno funcionamiento.

En primer lugar porque los usuarios del hospital son «mayores de 80 años, con patologías pulmonares, coronarias y reumatológicas, necesitan unas instalaciones que no cumple el Virgen de la Salud».

También porque «la población que utiliza el Hospital Virgen del Valle se merecen un hospital adecuado a sus características, ubicado en un espacio libre de contaminación acústica y lumínica, libre de contaminación ambiental y sobre todo un sitio donde puedan disfrutar del aire libre mientras están hospitalizados».

En este sentido, creen que el Virgen de la Salud por sus condiciones estructurales y la su situación geográfica «no cumple ninguno de los requisitos necesarios para estos pacientes».

Por último creen que «no se puede consentir» que «nuestros mayores» sean trasladados a unas instalaciones que se están cayendo, son obsoletas e inadecuadas, ubicadas al pie de una carretera que soporta un tránsito de coches excesivo, al lado de un espacio que en Carnavales, ferias y fiestas y demás actividades lúdicas de la ciudad se transforma en un lugar donde el descanso es imposible».

Puede causar prejuicio económico, pero no puede ser en «prejuicio de los pacientes»

Desde la Asamblea dicen entender que el traslado del nuevo hospital puede suponer un prejuicio económico para el comercio de la zona, pero inciden en que esa situación no se puede solventar usando a estos pacientes como «moneda de cambio», puesto que merecen «el máximo respeto, tranquilidad y cuidados en esta última etapa de su vida».

Por todo ello piden a los partidos «recapacitar» y que antes de aventurarse con sus propuestas hablen con los expertos en la materia, los profesionales de la sanidad con el fin de obtener mejores soluciones.