La Confederación Hidrográfica del Tajo ha detectado algunos restos de fibrocemento en el cauce del arroyo Ramabujas en Toledo, al ir a tomar nuevas muestras para su análisis, que han aflorado probablemente al secarse la vegetación y disminuir el caudal del cauce.
La Confederación ha tomado la decisión de retirar estos últimos restos de fibrocemento conforme al Plan de Trabajo aprobado por la Consejería de Economía, Empresas y Empleo de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, en el que se define tanto el gestor autorizado como el centro de tratamiento donde se van a depositar los residuos, tal y como ha informado la CHT en un comunicado.
En dicho comunicado, la CHT ha señalado que ha tomado nuevas muestras del cauce del arroyo Ramabujas para detectar o descartar cualquier contaminación por fibras de amianto y las ha enviado a un laboratorio acreditado para su análisis, como ya se hizo con los realizados en marzo, que dieron resultado negativo.
En este sentido, y con el propósito de explicar los trabajos llevados a cabo, el Organismo de cuenca ha solicitado al Ayuntamiento de Toledo, hasta el momento sin éxito -según la nota-, ser convocado a la Comisión creada para analizar la situación de los depósitos de fibrocemento procedentes de la antigua fábrica de Ibertubo.
Precisamente hoy se ha tenido conocimiento de la celebración de una nueva reunión de esta Comisión, a la que Confederación no ha sido convocada oficialmente, según ha asegurado.
Por tanto, de las tres reuniones celebradas hasta ahora, el organismo de cuenca sólo ha podido asistir a la constitutiva. EFE