La Junta y la Mancomunidad de Aguas del Sorbe (MAS) han sellado un convenio para poner en marcha la conexión entre la Estación de Tratamiento de Aguas de Mohernando y la presa de Alcorlo, que garantiza el suministro de agua a 380.000 habitantes de 44 municipios.
Así lo ha indicado la c, Marta García de la Calzada, que ha visitado las instalaciones de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de Mohernando, junto al presidente de la MAS, Jaime Carnicero, y la presidenta de la Diputación de Guadalajara, Ana Guarinos, entre otras autoridades.
García de la Calzada ha destacado en declaraciones a los periodistas que la firma del convenio, a la que se ha llegado «tras muchos meses de intenso trabajo», es «una buenísima noticia» para la provincia, porque supone garantizar el agua para 380.000 habitantes, repartidos en 44 municipios.
Tras la firma del convenio, la MAS adquiere también, por acuerdo con la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), una concesión de 16 hectómetros cúbicos del embalse de Alcorlo, que se suma a la reserva que continuará manteniendo de Beleña, de 53 hectómetros cúbicos.
Según el acuerdo, el coste total de la conexión Alcorlo-ETAP asciende a 29 millones de euros, que se financiarán a 25 años.
De esta cantidad, la MAS aporta poco más de 12 millones de euros, Infraestructuras de Aguas de Castilla-La Mancha casi 3 millones de euros, y la Unión Europea a través de Fondos Feder, casi 14 millones de euros.
Además, la firma viene acompañada de las gestiones necesarias para poner en marcha la tercera conducción, que Acuasur ejecutará para su finalización en el año 2016, con una inversión del Gobierno central de 50,5 millones de euros.
Se trata, ésta última, de «una obra muy demandada» que permitirá que ese agua pueda distribuirse más eficazmente y mejorar así los desarrollos y el crecimiento económico de la provincia de Guadalajara, en palabras de la consejera.
García de la Calzada ha puntualizado que el acuerdo sellado refleja también la «defectuosa» gestión del anterior gobierno regional, que «no quiso o no supo poner en funcionamiento esta infraestructura».
Algo con lo que ha coincidido el presidente de la MAS, que ha comparado los tiempos en los que la Junta y Aguas del Sorbe eran «enemigos», con las negociaciones de los últimos meses, presididas por «la lealtad y el respeto».
«Ayer fue un día enormemente feliz, porque se solucionaron problemas a los vecinos, y porque supone haber conseguido una garantía absoluta y total de abastecimiento de agua para los próximos años», ha concluido Jaime Carnicero.