El Gobierno de Castilla-La Mancha quiere que los escolares se acostumbren a comer fruta cotidianamente, ya que es un hábito muy saludable. Así, dará a cada alumno un mínimo de 11 raciones de fruta seca de temporada al menos una vez por semana para que la consuman en el descanso de su jornada escolar.
Así, el Gobierno regional pone en marcha el Programa de Consumo de Fruta Escolar en Castilla-La Mancha, que beneficiará a 37.555 alumnos de los tres ciclos de Educación Primaria, con edades comprendidas entre los 6 y los 12 años, que estudian en 226 colegios públicos y concertados de Castilla-La Mancha.
El programa cuenta con un prespuesto de 700.000 euros, de los que la Comunidad Europea aporta el 75 por 100. Cada alumno recibirá un mínimo de 11 raciones de 150-200 gramos de fruta fresca de temporada con una frecuencia al menos de una vez por semana para que la consuman in situ durante el periodo de descanso de la jornad escolar.
La iniciativa quiere sensibilizar y promover hábitos de vida saludables en el consumo de frutas y hortalizas entre los escolares.