El Gobierno de Castilla-La Mancha ha elaborado un protocolo de actuación dirigido a menores sobre identidad y expresión de género, con el que se pretende ofrecer una atención de calidad a menores transexuales y que es el germen de una futura ley que reconozca los derechos del colectivo LGTBI.
Para su desarrollo, se implementarán estrategias de coordinación y actuaciones conjuntas entre las consejerías de Bienestar Social, Educación, Cultura y Deportes, Sanidad y el Instituto de la Mujer,como organismo encargado de velar por la aplicación en Castilla-La Mancha del principio de transversalidad e igualdad de género, ha informado en una nota de prensa la Junta de Comunidades.
El documento ha sido presentado hoy en Guadalajara por el vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, y por la directora del Instituto de la Mujer, Araceli Martínez, que ha impulsado y coordinado el protocolo.
Martínez Guijarro ha destacado que el protocolo tiene como objeto establecer orientaciones y pautas de intervención para una adecuada atención y la protección de menores de edad que no estén conformes con la identidad de género asignada.
También se reconoce su derecho a la identidad sexual, «garantizando el libre desarrollo de su personalidad y la no discriminación por motivos de identidad de género», ha añadido.
El protocolo persigue, además, «facilitar procesos de inclusión, protección, sensibilización, acompañamiento y asesoramiento a la y el menor, a sus familias y a todo el personal con el que trabajen las personas menores trans».
Asimismo, propugna establecer actuaciones para prevenir, detectar y evitar situaciones de transfobia, discriminación o exclusión, incluyendo una coordinación institucional que permita identificar sus necesidades y adoptar, en su caso, las medidas educativas, sanitarias y sociales adecuadas.
Por su parte, Araceli Martínez ha señalado que es también un compendio de medidas y procesos que facilitan la labor de los profesionales ante las situaciones relacionadas con la identidad de género de las y los menores.
Según Martínez, con este protocolo se pretende «dar un paso adelante» hacia una ley destinada al colectivo LGTBI (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales e intersexuales) que reconozca sus derechos y evite la discriminación por razón de identidad de género u orientación sexual.
En el desarrollo del protocolo, el Instituto de la Mujer de Castilla La Mancha llevará a cabo actuaciones de prevención y sensibilización sobre identidad o expresión de género que contribuyan a la normalización de la realidad transexual.
Además, desde la red de recursos de este organismo se atenderán las demandas de las mujeres castellano-manchegas relacionadas con esta cuestión, procediendo en su caso a la derivación a servicios especializados.
En el ámbito educativo, el protocolo ayudará a los equipos directivos y los orientadores y profesores de los centros escolares a tratar la identidad de género, la expresión de género y la intersexualidad como opciones sociales normalizadas, previniendo el acoso escolar.
En cuanto al entorno familiar, en aquellos casos de mayor gravedad, en los que a causa de la actitud del padre, la madre o el entorno familiar, se detecten indicadores de maltrato o desamparo, se procederá según lo establecido en la ley 5/2014 de 9 de octubre de Protección Social y Jurídica de infancia y adolescencia de Castilla la Mancha.
Y en el ámbito sanitario, las demandas relacionadas con la diversidad de género serán atendidas inicialmente a través de los servicios de Atención Primaria, que de acuerdo con las necesidades planteadas, derivarán a las personas menores al especialista que corresponda, principalmente del ámbito de la endocrinología.