El consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz, ha animado a las familias a sumarse al acogimiento familiar «para que ningún niño esté solo en Castilla-La Mancha».
Durante su encuentro con familias de acogida en los Servicios Periféricos de Toledo, Echániz ha agradecido la tarea de estos padres y madres que «acogen en sus casas a niños que necesitan un hogar, dándoles el calor y el cariño que de forma circunstancial no tienen de su familia biológica».
En este sentido, el consejero ha agradecido la labor de las casi 500 familias castellano-manchegas que actualmente acogen en sus hogares, y de forma temporal, a 612 menores.
«El interés de las familias castellano-manchegas por convertirse en acogedoras ha crecido en los últimos meses. Gracias a su labor generosa y desinteresada muchos niños y niñas tienen un sitio donde vivir y unas personas que les dan cariño y les protegen», ha destacado.
En un comunicado, la Junta ha recordado que el acogimiento familiar «es la forma más adecuada para acoger a aquellos niños que, por diferentes circunstancias y de forma temporal, no pueden estar con sus familias».
En la actualidad, cincuenta familias se encuentran en la bolsa de acogimiento familiar esperando poder cuidar de un menor.
El consejero ha explicado que «pueden ser padres y madres de acogida todas aquellas personas mayores de 25 años dispuestas a ofrecer a los menores un ambiente estable y afectivo».
El primer paso para convertirse en una familia de acogida es rellenar una solicitud, disponible en www.castillalamancha.es y en los Servicios Sociales o Periféricos de Sanidad y Asuntos Sociales.
Una vez cumplimentada, deben presentar la solicitud junto a las fotocopias del DNI y del libro de familia o certificado de convivencia.
Posteriormente, los futuros padres de acogida tienen que realizar un curso de preparación y, una vez conseguida la idoneidad, ya pueden recibir a un menor en sus hogares.
Los niños tienen entre 0 y 18 años y su estancia en la familia de acogida no tiene una duración determinada, ya que depende de la situación particular del menor y de su familia de origen.
El titular de Sanidad ha aclarado que «el acogimiento es temporal ya que el objetivo final es que, si las circunstancias de la familia lo permiten, el niño pueda volver a su entorno familiar habitual».