El Gobierno de Castilla-La Mancha pretende desprenderse de 278 vehículos de su parque móvil calificados para desguace, chatarra o en rodaje de reparación, dado que, por su escaso uso, estado o antigüedad, no son necesarios para prestar un servicio público.
La Junta ha decidido dar publicidad a este procedimiento, que hoy se publica en el Diario Oficial de la comunidad, pese a que, por las características de los vehículos, se pueden vender de forma directa sin necesidad de subastarlos.
Entre las ofertas hay una autobomba de incendios por 60 euros o varios turismos a partir de 99 euros, mientras que los más caros se venden por 1.200 euros.
Quienes estén interesados pueden presentar ofertas hasta el día 2 de agosto.