La procesión del Santo Entierro intentó recorrer sin éxito este Viernes Santo, en formato reducido, las calles de Cuenca, y tuvo que resguardarse de la lluvia pocos minutos después de que partiera el primero de los pasos.
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— Junta de Cofradías (@JdC_Cuenca) 19 de abril de 2019
La irrupción de la lluvia al inicio del recorrido y cuando sólo la Cruz Desnuda de Jerusalén estaba bajo los arcos del Consistorio obligó a suspender el cortejo, como los tres anteriores de forma consecutiva.
Cada año en Cuenca se celebran tres procesiones durante el Viernes Santo en el marco de la Semana Santa, pero ninguna de ellas pudo salir durante esta jornada por la amenaza de lluvia.
Entre ellas, la procesión Camino del Calvario, conocida como Las Turbas, la más popular y multitudinaria, así como la única que desfila el Jueves Santo, Paz y Caridad.
El cortejo de este Viernes Santo, el Santo Entierro, partió desde la Catedral de la capital conquense pasadas las 21.30 horas, algo después de la hora prevista tras aplicar el protocolo de lluvia y dar una segunda oportunidad a esta procesión, muy concurrida por los fieles, que cubrieron de paraguas oscuros la Plaza Mayor.
Entre plásticos que resguardaban las imágenes y, capuz y capuz, salió el primero de los pasos, la Cruz Desnuda de Jerusalén, que permaneci´durante varios minutos bajo los Arcos del Ayuntamiento, aunque tuvo que darse la vuelta minutos después y volver al templo.
Allí, autoridades civiles y militares, junto al clero, acompañaron a las imágenes, en un ambiente de tristeza y silencio solo roto por las marchas que tocaba la Banda de Música de Cuenca.
Entre los asistentes, el diputado por Cuenca y candidato del PP al Congreso, Rafael Catalá, y el vicepresidente de la Junta, José Luis Martínez Guijarro.
[ze_summary text=»… También en Ciudad Real»]… También en Ciudad Real[/ze_summary]Asimismo, el aviso de fuertes lluvias que se preveía durante el recorrido procesional del Santo Entierro en Ciudad Real obligó anoche a las principales hermandades que debían salir a la calle a procesionar a quedarse en sus templos.
Las hermandades del Descendimiento, el Cristo de la Piedad, la Dolorosa de la Catedral, las Angustias y el Santo Sepulcro, tomaron la decisión de no realizar su estación de penitencia ante la previsiones de lluvias que hacían peligrar la integridad de sus pasos.
Los numerosos cofrades que deberían participar en esta procesión del Viernes Santo vivieron con pena y resignación el no poder procesionar en este desfile, al que estaba previsto que acudiera el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que tuvo que suspender su visita a Ciudad Real.
En Daimiel (Ciudad Real), la Junta Directiva de la Cofradía Santísimo Cristo de la Expiración y Nuestra Señora de los Dolores tomaba la decisión de suspender la procesión ante la insistente lluvia que caía durante la tarde del viernes, según informó en un comunicado el Ayuntamiento de Daimiel.
El consiliario de la cofradía, Valentín Sánchez, ofrecía un acto litúrgico, al que seguían las marchas procesionales de la Banda Municipal de Música y de la Banda de Cornetas y Tambores ‘La Concordia’ de Argamasilla de Calatrava.
Al igual que ocurriese por la mañana con ‘Los Moraos’, la segunda procesión del Viernes Santo, la de ‘Los Blancos’, tampoco pudo salir a la calle.
Los 28 litros recogidos en Daimiel dejaron también en los templos a pasos y nazarenos de las dos cofradías llamadas a cerrar el Viernes Santo en Daimiel, ‘Negros’ y ‘Corbatos’, que decidieron cancelar sus respectivos desfiles en la calle.