Recientemente se ha celebrado el Día Mundial contra la Neumonía. Esta enfermedad se cobró en 2011 la vida de 3.500 niños y niñas cada día, bien por falta de conocimientos en la prevención, o bien por no poder acceder al tratamiento.
Según explica Unicef, medidas tan simples como lavarse bien las manos con agua y jabón o que los niños reciban lactancia materna hasta los dos años son una garantía para evitar este tipo de infección.
Además, el tratamiento con amoxicilina cuesta menos de 30 céntimos de dólar, pero hay millones de familias que no pueden permitírselo o que ni siquiera tienen acceso a ello.
Unicef ha renovado su compromiso con la supervivencia infantil y uno de sus pilares es la lucha contra la neumonía.
La tasa de mortalidad infantil es uno de los principales indicadores de la pobreza y del grado de desarrollo de un país. Un número de muertes de niños menores de cinco años ha disminuido de casi 12 millones en 1990 a menos de 6,9 millones en 2011. Unos 14.000 niños menos mueren cada día respecto a hace dos décadas. Aún así, la cifra es muy alta: 19.000 al día. Y lo que es más difícil de comprender: las causas se pueden evitar con medidas sencillas y poco costosas.
Por ello Unicef ha puesto en marcha la campaña «cumpledías» con un doble objetivo, por un lado sensibilizar a la sociedad sobre este problema y por otro captar fondos a través de microdonaciones vía sms (enviando un sms con la palabra Unicef al 28028, se contribuye con un día de tratamiento contra la desnutrición aguda grave).