Miembros de la Plataforma de Afectados por Hepatitis C de Castilla-La Mancha han estado hoy encerrados en el Hospital de Toledo para exigir que se haga un estudio epidemiológico que permita conocer cuántos afectados hay y se incorporen al tratamiento los pacientes desde los grados iniciales.
En el encierro -que se ha desarrollado hasta media tarde- han estado acompañados por miembros de colectivos de afectados del País Vasco, Valladolid y Salamanca, según ha explicado la presidente de la Plataforma, Pilar Milla.
Exigen que se prescriban los medicamentos cuando se detecta la enfermedad, que se haga un estudio epidemiológico para conocer, de manera fiable, el número de afectados que hay en España y, también, un programa de cribado centrado inicialmente en colectivos de riesgo y que se amplíe después al resto de la población.
También demandan campañas preventivas con los colectivos de afectados, que los reclusos tengan acceso a los fármacos como el resto de ciudadanos y que haya un presupuesto específico destinado a la investigación y el tratamiento en los menores afectados.
Milla ha incidido en la importancia de detectar en sus orígenes la Hepatitis C, «a la que llaman la enfermedad silenciosa, porque cuando da la cara es la fase 4», ha precisado.
La Plataforma estuvo reunida con responsables del Sescam a los que expusieron las reivindicaciones que mantienen desde hace dos años, según la presidenta quien ha señalado que «nos sentimos engañados» y ha agregado que las competencias sanitarias dependen de las autonomías.
Al encierro de hoy -que no continuará mañana, como estaba inicialmente previsto, por la enfermedad de un integrante- han acudido una treintena de personas, según ha dicho Pilar Milla, que también ha criticado el «lugar» que se les ha asignado en el centro hospitalario.
La Plataforma de Afectados por Hepatitis C de Castilla-La Mancha forma parte de la coordinadora estatal, que también incluye a afectados del País Vasco, Cataluña, Castilla y León, Aragón, Asturias, Andalucía, Canarias y Baleares.