Los nacimientos han disminuido en el primer semestre de este año en Castilla-La Mancha respecto al mismo periodo del año pasado y también las defunciones, cuyo número casi duplica a los nacimientos.
Según las Estadísticas del Movimiento Natural de la Población difundidas hoy por el INE, que aportan datos de nacimientos, defunciones y matrimonios correspondientes al primer semestre de 2016, la población española se reduce a un ritmo de 72 personas al día, resultado de la diferencia entre las muertes y los nacimientos, un dato que supone que, sólo entre enero y junio de este año, España haya perdido 12.998 habitantes.
Ya hay 12 comunidades en las que el número de muertes ha sido superior al de nacimientos, de manera que han perdido población en este primer semestre. Una de ellas es Castilla-La Mancha, donde han nacido 8.561 personas frente a las 8.990 de 2015 (-4,8 por 100) y han fallecido 9.691 frente a las 10.664 del año pasado (-9,1 por 100). Esto supone que en la región la población se reduce a un ritmo de 188 personas al mes.
Las únicas comunidades en las que han aumentado los nacimientos en este periodo son Baleares (1,5 por 100), Asturias (0,6 por 100), Cantabria (0,4 por 100) y La Rioja (0,2 por 100), así como la ciudad de Ceuta (0,8 por 100). En el lado opuesto, Cataluña es la autonomía donde más ha bajado el número de recién llegados al mundo, que se redujo un 9 por 100 de enero a junio, en comparación con el mismo periodo del año 2015, seguida de Aragón, donde disminuyó el 6 por 100, y la ciudad autónoma de Melilla, donde cayó el 7,4 por 100.
Respecto a las defunciones, su número es inferior en todas las comunidades al del primer semestre del año pasado, de manera más acusada en La Rioja (-10,9 por 100), Aragón (-10,2 por 100) y Extremadura (-9,9 por 100). Sólo aumentó en Ceuta, el 3,6 por 100.
Con la diferencia entre nacimientos y defunciones, el saldo vegetativo fue positivo en cinco comunidades (Madrid, Andalucía,Murcia, Baleares y Canarias) y ya es negativo en las otras 12. De ellas, la que más gana es Madrid, con 8.013 nacimientos más que muertes, casi cuatro veces más que la siguiente, Andalucía, donde el saldo fue positivo en 2.309. La que más población pierde en términos absolutos es Galicia (6.951 muertes más que nacimientos), seguida de Castilla y León (6.093).
El INE también ha facilitado la estadística definitiva del año 2015, en la que eran 10 las comunidades autónomas con saldo negativo, con más muertes que defunciones. Durante ese año Madrid fue la que tuvo un mayor saldo positivo (18.020), por delante de Andalucía (8.632) y Cataluña (5.584). Madrid es también la comunidad con la mayor esperanza de vida, de 84,06 años, y Ceuta y Melilla con la menor, de 80,35 y 80,02, respectivamente. En cambio, las dos ciudades autónomas son las que tienen la mayor tasa bruta de natalidad, de 12,97 y 17,83 nacimientos por cada 1.000 habitantes, en cada caso, muy superior al 9,02 por 100 de media nacional. Asturias tiene, por su parte, la mayor tasa bruta de mortalidad, 12,98 fallecimientos por cada 1.000 habitantes.