El alcalde de Talavera, Jaime Ramos, felicitaba hace unos días a Javier Fernández, oficial de la Policía Local de la ciudad de la cerámica, por la medalla al Mérito de la Iniciativa Social que concede la Junta de Castilla-La Mancha.
El alcalde de Talavera, Jaime Ramos, recibió a Javier para darle la enhorabuena por la medalla concedida por la Junta.
En 2009 se creó una sección en la Policía Local de Talavera que, en aquel momento, fue muy novedosa. Se trataba del Equipo de Atención Social, un servicio cuyo objetivo era y es, entre otros, atender de manera particular casos de violencia de género o de menores que necesitan una atención especial.
Al frente del mismo se encuentra Javier Fernández y su compañera Beatriz, que trabajan para conseguir que las actuaciones policiales no queden solamente en un mero trámite burocrático. De este modo, hacen un seguimiento de las personas afectadas, comprueban en qué situación viven y les ayudan a mejorar con soluciones que, en la mayoría de los casos, desconocen. Así, por ejemplo, Javier y Beatriz han mostrado a muchas personas mayores que viven solas los recursos que existen en la actualidad para ellas como, por ejemplo, los servicios de teleasistencia.
Esta pareja de policías ha trabajado con menores problemáticos y familiares preocupados por los jóvenes que se sienten acosados en el colegio o instituto. Precisamente, en los centros escolares se encuentran con el problema del absentismo, donde Beatriz y Javier también actúan. «Nos interesamos por saber por qué no les gusta el colegio, si los padres no toman cartas en el asunto… Hay colectivos que se dedican a la venta ambulante y sacan al chaval de 10 ó 12 años para que les ayuden», explicaba Javier a Encastillalamancha. Ahí también hacen una labor importante por la educación de los adolescentes.
VIOLENCIA DE GÉNERO
«Yo el dinero lo tengo justo, no me deja salir con las amigas…» Son declaraciones de alguna de las mujeres que han sufrido violencia de género y que han acudido a la Policía Local para contar lo que les estaba pasando y pedir ayuda.
«Normalmente las víctimas de violencia de género vienen acompañadas», indicaba Javier, quien destacaba que «hay veces que llaman vecinos informando de que están pegando a una mujer, en otras ocasiones llama la propia víctima para decirlo» y ahí están ellos para asesorarla en los medios que hay hoy en día y superar esa situación.
LAS HISTORIAS QUE NO SE OLVIDAN
Cuando acaban su jornada laboral, «intentas desconectar, pero los problemas te los traes a casa» ya que «siempre recuerdas una llamada o porque están agrediendo a una mujer o porque hay un padre que dice que a su hijo le tienen acribillado en el cole».
Al final lo que queda es el agradecimiento de las personas a las que han ayudado. «Hay gente muy agradecida. Todas las navidades viene una señora a felicitarnos las Pascuas… Que una mujer de unos 80 años se acuerde aún de nosotros y nos llame de usted…».
Javier recalcaba que la medalla es fruto del trabajo que junto a él realiza Beatriz, su compañera, y la Jefatura de Policía de Talavera, porque al final «todos participamos» de alguna manera en este servicio.