Los castellanomanchegos tienen más incertidumbre y están más irritados que la media de los españoles, y también tiene una tristeza algo mayor y una alegría menor, según recoge la oleada de invierno del Barómetro Index Life.
Las principales preocupaciones de los españoles son, según este sondeo, el paro; la crisis económica plasmada en el miedo por el empleo, la precariedad laboral, la pérdida de derechos sociales y el deterioro del sistema sanitario; la corrupción; y el bienestar de la familia y el futuro de los hijos.
Este barómetro es una iniciativa conjunta del Instituto de Prospectiva Internacional (IPI), el Grupo Cofares y la Agencia EFE, y su objetivo es ofrecer una medida del estado de ánimo de la sociedad española y conocer sus principales preocupaciones.
Los datos de esta tercera oleada, cuyo trabajo de campo se realizó entre el 13 de enero y el 12 de febrero de 2015, han sido presentados por Juan José García de la Cruz, sociólogo y director general del IPI.
En la presentación también han estado la directora de Redacción de la Agencia EFE, María Luisa Azpiazu; el director general de Servicios a la Farmacia de Cofares, Ángel Ramos; el director gerente de CORE (Cofares Responde), Octavio García Burguera; y el responsable del área de demoscopia de CORE, José Luis Pérez.
En Castilla-La Mancha los datos indican que la sociedad está por encima de la media en incertidumbre y también, aunque ligeramente, en irritación; tiene menos fuerzas de ánimo; más tristeza y algo menos de alegría, y una calidad similar a la media.
«Estamos ante una sociedad que se siente con fuerzas para seguir adelante con sus proyectos personales», ha señalado García de la Cruz.
El barómetro recoge que un 25 por100 de la población española está «muy enfadada» y que hay «mucha gente predispuesta al cambio», ha añadido el sociólogo, quien también ha resaltado: «No hay resignación, no hay apatía, la crisis ha generado vitalidad».
El barómetro, de carácter trimestral, se sustenta en dos paneles: uno de población general en el que han participado 1.880 personas encuestadas; y otro de empleados de oficinas de farmacias de todo el territorio nacional con 1.200 entrevistas en todas las comunidades autónomas.
Todos estos datos a nivel nacional no reflejan una España homogénea sino que hay diferencias entre comunidades autónomas, algunas más sutiles y otras más evidentes, señala el barómetro.