Empleados públicos de todas las administraciones, algunos vestidos de luto, se han concentrado en Castilla-La Mancha ante sus centros de trabajo para protestar, al igual que en el resto del país, por los recortes anunciados por Mariano Rajoy, que se centran en la supresión de la paga extra de Navidad. Las concentraciones han estado convocadas por los sindicatos CC.OO., UGT y CSIF, este último mayoritario en la función pública regional, y las más concurridas han tenido lugar en hospitales, delegaciones de la Junta y en la Consejería de Administraciones Públicas en Toledo. En esta última se han congregado unas 200 personas.
Según ha dicho a Efe el presidente del sector de la Administración General del CSIF en Castilla-La Mancha, Roberto Rincón, la gente está «muy cabreada» porque los recortes se vuelven a centrar en los empleados públicos, entre los que ha diferenciado, por un lado, a funcionarios y laborales, que han ganado su plaza por oposición y, por otra, a los «enchufados», con los que se ha engordado el «despilfarro».
Los empleados públicos demandan de los políticos que los responsables de esta situación «paguen por lo que han hecho» y que no se haga recaer de nuevo en los funcionarios y laborales el peso de la crisis, ha indicado Rincón, quien ha recordado que en Castilla-La Mancha los empleados de la Junta llevan ya tres recortes, pues, a los que adoptó Zapatero y los aprobados por Cospedal ahora se suman los de Rajoy.
Por su parte, la coordinadora regional del Área Pública de CCOO CLM, Carmen López, que ha asistido a la concentración que ha tenido lugar ante la delegación de la Junta de Albacete, ha señalado que «hoy es mal día, como viene siendo habitual, para todas las personas de este país y en especial para las trabajadoras y trabajadores de lo público.
«El Gobierno, según López, con su autoritarismo habitual y amparándose en su mayoría electoral está quitando salarios, derechos y cualquier mejora del estado de bienestar».
Ha anunciado que las movilizaciones seguirán el próximo 19 de julio «contra las agresiones de un gobierno canalla que aplaude y se regodea con sus canalladas».
Los representantes sindicales con presencia en la Mesa de la Función Pública -CCOO, UGT, CSI-CSIF e Intersindical de Castilla-La Mancha- se sumaron a la concentración de trabajadores en la puerta de la Consejería de Administraciones Públicas en Toledo y no acudieron a la Mesa Sectorial.
Así, los sindicatos han hecho llegar al director general de la Función Pública, Juan Manuel de la Fuente, una carta trasladando el rechazo unánime a las medidas que están tomando los gobiernos central y regional.
En concreto, los sindicatos le indican que los sindicatos han decidido por unanimidad no asistir a la Mesa Sectorial para así manifestar su «indignación» por entender que con esta convocatoria la Junta sólo pretende comunicarles la amortización de plazas que pretende publicar en el Diario Oficial, sin tener en cuenta la opinión como representantes de los trabajadores.