La Archidiócesis de Toledo ingresó en 2017 unos 40 millones de euros y tuvo unos gastos que ascendieron a cerca de 39 millones de euros, de los que más de 11 se han destinado a la construcción de nuevos templos y a programas de rehabilitación, seis millones a la retribución del clero y cerca de tres millones a la retribución del personal seglar.
El resto se distribuye en acciones pastorales y asistenciales, a las que se han destinado cerca de 5.900.000 euros; aportaciones a los centros de formación, con algo más de dos millones; y, finalmente, conservación de edificios, con una cifra que supera los diez millones de euros, según ha informado el ecónomo diocesano, Anastasio Gómez Hidalgo.
Los ingresos de la Archidiócesis de Toledo, desglosados
Como todos los años, la administración diocesana, con ocasión del Día de la Iglesia Diocesana, que se celebra este domingo, 11 de noviembre, bajo el lema ‘Somos una gran familia, contigo’, ha hecho públicos los datos económicos de la Archidiócesis durante el último año, que incluyen los aportados por el Arzobispado, las parroquias, la Catedral y los Seminarios.
El ecónomo diocesano, que ha estado acompañado en la rueda de prensa por el arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, y el vicario general de la Archidiócesis de Toledo, Francisco-César García Magán, ha desglosado también los ingresos totales, que ascienden a 40.064.127 euros.
Dentro del capítulo de ingresos ordinarios, las aportaciones de los fieles se han acercado a los ocho millones, mientras que de la asignación tributaria la Archidiócesis ha recibido 5.600.000 euros.
El capítulo de ingresos de patrimonio y otras actividades suman una cantidad que supera los 11,5 millones, mientras que los ingresos corrientes se acercan a los ocho millones. La cantidad que corresponde a enajenaciones de patrimonio y otros ingresos extraordinarios supera levemente los siete millones.
En lo que se refiere, en concreto, a las cuentas del Arzobispado, la Administración Diocesana presenta unos resultados que arrojan un déficit asumible del 0,14% (24.793 euros). El Arzobispado de Toledo, durante el año 2017, ha gastado,17.582.468 euros, una cantidad prácticamente idéntica a lo ingresado que, asciende a 17.557.675 euros.
En 2017, la Diócesis de Toledo contaba con 561 sacerdotes con una edad media de 54 años, 1.107 religiosos, 140 misioneros, 273 parroquias, 2.171 catequistas, 53 monasterios, 28 centros educativos católicos y dedicó 2,5 millones de horas a la actividad pastoral.
Este año se celebraron 4.516 bautizos, 5.221 comuniones, 3.814 confirmaciones y 1.341 matrimonios.
La Archidiócesis de Toledo contaba además con 45 centros asistenciales, que prestan sus servicios a 1.410 personas mayores, enfermos crónicos o personas con discapacidad, así como a 36 drogodependientes.
En las diversas Cáritas parroquiales, así como en Cáritas Diocesana colaboran 2.098 voluntarios. Estas entidades atienden a 32.530 personas en situación de exclusión social. Además, Manos Unidas, que cuenta con otros 650 voluntarios, y otras entidades diocesanas, han financiado durante el pasado año 26 proyectos de cooperación al desarrollo.
Por lo que se refiere a la actividad cultural, la archidiócesis, entre otras diversas iniciativas, conserva y mantiene ocho bienes inmuebles declarados de Interés Cultural.
Entre las novedades del último año resalta el cambio que se ha producido en la Fundación Canónica Diocesana ‘Virgen de la Muela’, en Corral de Almaguer, donde se ha conseguido la viabilidad económica del centro, que ha celebrado el 25 aniversario de la fundación de dicha residencia de mayores.