Los vecinos de Hiendelaencina (Guadalajara) tendrán que pagar «a escote» la renovación de los tramos de tuberías de la red de agua del municipio que, según un informe de Salud Pública, están contaminadas por el vertido accidental de gasoil que se producía el pasado 5 de octubre.
Según ha explicado a Efe el alcalde, Mariano Escribano, esta solución ya se ha hablado con los vecinos en las reuniones que mantienen los fines de semana, ya que el consistorio no tiene fondos para afrontar el coste de la obra, estimado en unos 80.000 euros.
«Tenemos 300 contadores de agua, si el coste es de 80.000 euros o algo así las cuentas son fáciles: 80.000 entre 300 y a lo que toque; igual que se pide dinero voluntario para una fiesta, en este caso todos seremos solidarios, ¿qué vamos a hacer?».
Según Escribano se ha optado por esta opción después de pedir ayuda a la Junta y la Diputación provincial de Guadalajara y que desde esta institución se haya respondido «que lo paguen los seguros».
El alcalde no ha querido opinar sobre la visita del consejero de Sanidad, José Ignacio Echániz, al municipio el domingo pasado y ha anunciado que, pese al informe elaborado por los técnicos que autorizan el consumo en gran parte de la red, se va a realizar una limpieza de la red de distribución de agua «para mayor tranquilidad de los vecinos».
Según ha señalado, se trata de una decisión tomada en una reunión vecinal y consistirá en vaciar la red dos o tres veces y observar que de los grifos no salen residuos.
«No estamos en contra de la decisión de Sanidad ni de los técnicos ni de que el agua sea potable o no, solo vamos a hacer una limpieza que entendemos que es lo que queremos los vecinos para mayor tranquilidad, y donde nos han dicho que arranquemos las tuberías, las arrancaremos», ha reiterado Escribano.
De esta manera, y siguiendo la recomendación de los Servicios Periféricos de Sanidad, se sustituirán cuatro tramos de cañerías en la zona más cercana al punto del vertido de gasoil.
En un escrito remitido al Ayuntamiento el pasado jueves se acotaba esos trabajos a parte de las tuberías de las calles General Cecilio Oliver, Guadalajara, la Travesía Joaquín Latova y la plaza del mismo nombre, y se autorizaba el consumo de agua en el resto de la red.
Asimismo Sanidad comunicaba al Ayuntamiento de Hiendelaencina que deberá informar a los vecinos en general, y en especial a los propietarios de las casas que no estén habitadas de forma continuada de que, en caso de percibir algún olor, color o sabor extraño, no deben consumir ni usar el agua y avisar al gestor del abastecimiento.