La presidenta de Nuevas Generaciones (NNGG) del PP de Castilla-La Mancha, Cristina Molina, ha acusado hoy al PSOE de crear alarma y mentir a los ciudadanos sobre la sanidad de la comunidad después de que, a su juicio, fuesen ellos los «responsables» de dejar el sistema sanitario «en quiebra».

Molina ha reaccionado así en rueda de prensa a la denuncia del portavoz de Sanidad del PSOE en las Cortes regionales, Fernando Mora, sobre que hay pacientes del Hospital Virgen de la Salud de Toledo que esperan más de siete horas en el pasillo de Urgencias para ser trasladados a una habitación, como el caso de un hombre de 83 años que finalmente murió en el Hospital Virgen del Valle.

«Con estas críticas lo único que consigue el PSOE es perjudicar a los trabajadores de la sanidad de Castilla-La Mancha», ha advertido la presidenta regional de NNGG, quien ha asegurado que «si ha habido una presidenta que ha apostado por la sanidad» es María Dolores de Cospedal.

Esto se refleja, ha argumentado, en las últimas encuestas conocidas sobre el sistema sanitario de la región, que «dan un notable alto» a la asistencia sanitaria en Castilla-La Mancha.

Con todo ello, ha acusado al PSOE de crear alarma «en cualquier tipo de materia» y, en el caso de la sanidad, ha reprochado a los socialistas que dejaran «600.000 facturas sin pagar» y «una deuda de 5.000 millones de euros».

«No pagaban las prótesis de los enfermos, la insulina de los diabéticos ni los medicamentos de los enfermos oncológicos», ha añadido.

Molina ha asegurado que Fernando Mora «miente, exagera e intenta alarmar a la población», lo que se trata, a su juicio, de «un comportamiento miserable».

En este sentido, ha recordado que los médicos de Urgencias del Hospital de Toledo ya «salieron a rectificar al PSOE por sus declaraciones» en un caso anterior.

«Y una vez más siguen demostrando que es un partido que lo único que quiere es la crítica por la crítica y no reconoce el trabajo que hace a día de hoy el Gobierno de Cospedal», ha lamentado.