El presidente del Consejo de la Juventud de Castilla-La Mancha, Javier Payo, ha anunciado su inminente dimisión de este cargo, debido a la «falta de apoyo» que, en su opinión, ha recibido dicho órgano y el colectivo juvenil, en general, por parte del Gobierno de Cospedal.
Payo, responsable del consejo castellanomanchego de juventud desde hace dos años, ha explicado a Efe que hoy mismo remitirá una carta a todas las entidades que conforman el consejo para informarles de su decisión y de la convocatoria de la Comisión de Responsables del Consejo de la Juventud para el próximo día 26, para formalizar la dimisión.
Preguntado por las razones que le han llevado a tomar esta decisión, Payo ha afirmado que no quiere ser «cómplice» de «la falta de políticas de juventud y sociales de las que está haciendo gala el Gobierno de Cospedal, con un paro juvenil que supera el 60 por 100 en la región».
Como muestra de esta falta de apoyo a la juventud, el todavía dirigente del Consejo de la Juventud de Castilla-La Mancha ha resaltado que durante el ejercicio 2013 se destinaron a políticas de juventud, procedentes de los Presupuestos de la Junta, 14,6 millones de euros, frente a los 507.000 euros que se contemplan en el anteproyecto de presupuestos para 2014.
Esta cifra «irrisoria» demuestra «lo poco que le importa al Gobierno de Cospedal la juventud», según Payo, que ha manifestado que otra muestra de esto es la próxima derogación del Consejo Regional de la Juventud, según se anuncia en el tomo tres del anteproyecto de presupuestos de la Junta para 2014, ha dicho Payo.
Tras tachar esta iniciativa como «un golpe a la participación democrática», Payo ha manifestado sentirse «un poco aliviado» por haber conseguido, al menos, «salvar los Consejos Locales», lo que ha costado, ha dicho, «más de 12 reuniones» con la directora general de Empleo y Juventud, Esther Baos.
Payo ha criticado que el argumento esgrimido por la Junta para anunciar la desaparición del Consejo Regional de la Juventud sea que, durante los dos últimos años, este órgano no ha tenido actividad concreta alguna y no cuenta con trabajadores ni estructura firme alguna, «cuando durante este tiempo no hemos recibido ni un céntimo de euro», ha lamentado Payo.
Y ha agregado que, si este órgano ha salido adelante ha sido gracias al Consejo de la Juventud de España y a la «generosidad» de los miembros de la Comisión Permanente del Consejo, «que hemos financiado todo los gastos», ha aseverado.
Por otro lado, Payo ha apuntado que, con el caso de los 120 jóvenes españoles, de ellos 80 castellanomanchegos, que emigraron a Alemania por un empleo y ahora se encuentran «abandonados y sin empleo», ha quedado demostrado que «la única preocupación del Gobierno regional ha sido pagar la factura de los políticos de Castilla-La Mancha que viajaron a Alemania a hacerse la foto».
Y ha lamentado las «penosas condiciones» en las que han estado viviendo estos jóvenes, «muchos de ellos en sótanos», ha dicho, desde su llegada a Erfurt el pasado 19 de septiembre, «para ver incumplidas las promesas que se les hicieron».