La Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha ha encargado la elaboración de un Plan Integral de Sanidad de desarrollo rural «muy ambicioso y que incorporará no sólo a los 21 Puntos de Atención Continuada (PAC) -los afectados por el cierre de las Urgencias-, sino al conjunto de los 182 PAC que hay en Castilla-La Mancha y a los 919 municipios, de los que 737 no tienen PAC».
El responsable sanitario castellano-manchego ha explicado que la redacción del plan y sus líneas maestras está en manos del personal técnico de la Consjería, no ha destacartado el cierre de las urgencias nocturnas previstas y ha adelantado que espera que esté listo para antes del verano.
Así lo ha anunciado el consejero de Sanidad, Ignacio Echániz, durante la rueda de prensa posterior a la celebración del Consejo de Gobierno y tras conocerse, mediante su publicación en el Diario Oficial de la región, la derogación de la Orden que preveía el cierre nocturnos de las Urgencias en los citados 21 PAC de la comunidad autónoma.
También ha explicado que en estos momentos Castilla-La Mancha es la única comunidad autónoma española que tiene un helicóptero equipado para atender en horario nocturno urgencias y emergencias, «una potencialidad y singularidad de nuestra sanidad».
La Sanidad es «móvil, dinámina y tiene que adaptarse a las circunstancias», explicó el consjero para quien sustituir los PAC que apenas tienen uso por vehículos equipados que pueden atender urgencias y emergencias en el domicilio del paciente o allí donde se produzcan forma parte de «la Sanidad del siglo XXI, mientras que los centros estáticos son propios del siglo XXI».
Echániz ha recalcado que el nuevo modelo ahora derogado «se puso en marcha para mejorar la atención sanitaria urgente en horario nocturno, sobre todo en zonas de utilización baja, pero contando con medios móviles más modernos, útiles, eficaces, rápidos, resolutivos…».
Pero, ha lamentado, «que algunos ayuntamientos, sólo en Castilla-La Mancha, no en ninguna otra comunidad autónoma, incluso las gobernadas por el PSOE, que no tienen competencias ni han tenido visión de conjunto en lo que suponía prestar asistencia sanitaria al 100 por 100 de los usuarios, acudió al Tribunal Superior de Justicia y éste adoptó medidas cautelares que a lo mejor se mantendrían durante años hasta que decidiera el Tribunal Supremo».
Por eso ha recalcado que el Gobierno de la región no se podía permitir esa demora, «podríamos haber recurrido a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo, teníamos de plazo hasta el pasado día 25, pero no lo hicimos porque no nos podíamos permitir ese retraso».
O, lo que es lo mismo, «no podemos estar pendientes de resoluciones judiciales que tarden tanto, aunque hubiera votos particulares que nos daban la razón. Ante ese bloqueo, decidimos no recurrir y de ahí que decidiéramos derogar la Orden del pasado 14 de enero».
«COMPORTAMIENTO BASTANTE EGOÍSTA DE ALGUNAS PERSONAS CON EL RESTO DE CASTILLA-LA MANCHA»
Echániz se ha acordado también de los ayuntamientos que recurrieron la Orden. Aun sin citarlos, se ha referido a aquellos «que han tenido un comportamiento bastante egoísta de algunas personas con el resto de Castilla-La Mancha».
Y ha dejado claro que es la Consejería de Sanidad la competente «para gestionar, cerrar o abrir centros de salud, farmacias, medios diagnósticos y todos los recursos materiales y humanos que componen la Sanidad. Porque nos mueve el interés general, no el particular».