El Sindicato de Enfermería, Satse Ciudad Real, ha denunciado «la falta de profesionales de enfermería en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital General Universitario de Ciudad Real, lo que provoca la sobrecarga de trabajo de los profesionales en un servicio, como es la UCI, donde el nivel de asistencia y de gravedad de los pacientes requiere un tratamiento especial».
En concreto, «es la Unidad 1 de la UCI donde la planificación de personal de la Unidad no se corresponde con las recomendaciones nacionales e internacionales (faltaría al menos una enfermera en el turno de noche), no permitiendo una asistencia segura y de calidad para los pacientes ingresados en la citada unidad, incrementándose el riesgo de complicaciones».
«Esta situación supone un agravio para los pacientes ingresados respecto a la Unidad 2 de la UCI donde sí se respetan las recomendaciones en los turnos de mañana, tarde y noche», añaden.
Además, se da el agravante de que «la Gerencia decide abrir camas cerradas, para las que no hay asignado personal y para las que, debido a la improvisación, no siempre se consigue contratar los profesionales necesarios para atenderlas», agregan.
Desde Satse se incide «en el agravio que supone, tanto para los pacientes como para los profesionales de enfermería, el hecho de que el turno de noche de la Unidad 1 siempre disponga de menos profesionales que en la Unidad 2, máxime cuando la relación entre la adecuada dotación de personal de enfermería en las UCI y los resultados en términos de calidad (mortalidad, complicaciones) y eficiencia (estancia media) está ampliamente contrastada, asociándose con mayores tasas de supervivencia para los pacientes con alto riesgo de muerte».
Esta situación «se viene denunciando ante la Gerencia del hospital y también ante los responsables del Sescam tanto desde Satse como por parte de los trabajadores de la UCI, sin que hasta el momento se haya puesto solución», aseguran.
Y concluyen diciendo que a lo largo del pasado año y en lo que va de 2017 «se han enviado hasta 23 escritos a los responsables sanitarios y se han mantenido distintas reuniones para exponerles lo grave que es que la plantilla de profesionales de enfermería de este servicio se aleje de las recomendaciones internacionales, y también que cuando se decide abrir una cama para la que no hay asignada personal no solo se pone en riesgo al paciente que ingresa, sino al resto de pacientes de la Unidad que ven disminuidos sus cuidados».