La Federación de Empleados de Servicios Públicos (FeSP) de UGT Castilla-La Mancha ha exigido al conjunto de Administraciones públicas un pacto conjunto para ampliar el número de profesionales y aumentar los recursos económicos para reforzar los resultados positivos en la lucha contra la violencia machista.
Así lo ha asegurado la secretaria general de la FesP UGT CLM, Carmen Campoy, en rueda de prensa junto a la secretaria de Mujer y Política Social, Milagros Ruiz-Roso, con motivo de la campaña puesta en marcha por su sindicato bajo el título ‘Nos va la vida en ello’ y con motivo de celebrarse el viernes el Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres.
Campoy ha realzado el decálogo de medidas que UGT reclama y que pasan, en primer lugar, «por un pacto estatal para el desarrollo de la Ley Integral contra la Violencia de Género» con medidas en todos los ámbitos -educativo, social, sanitario, judicial y policial- y «la utilización de todos los recursos».
«Reivindicamos que las Administraciones públicas asuman el ineludible papel que les asigna la ley para prevenir y proteger a las víctimas de violencia de género», ha añadido Campoy, quien ha pedido a los poderes públicos que «de una vez por todas sean capaces de dejar de frivolizar sobre una situación que nos mata».
A su juicio, es esencial «sensibilizar a la generaciones futuras para proteger a las víctimas y erradicar esta grave situación que deteriora y anula el desarrollo de la libertad individual y la integridad física de las mujeres».
En este sentido, Milagros Ruiz-Roso ha incidido en como las Unidades de Igualdad puestas en marcha por las Subdelegaciones del Gobierno «no están funcionando» porque «no existe coordinación» y, además, no se mejorará la Ley «si no evaluamos su cumplimiento» desde el momento que se produce la denuncia.
Ha pedido la urgente adopción de medidas civiles, que se sumen a las penales, porque «no debemos equivocar que una persona interponga denuncia con que la violencia de género no se vea».
Y, ha aludido, a los «reveladores y escalofriantes» datos de la macroencuesta de 2015 que «nos dicen que el 66 % de las mujeres entrevistadas manifiestan haber sido víctima de algún tipo de violencia a lo largo de su vida y no aparecen en ningún sitio, y probablemente muchas mujeres asesinadas no interpusieron denuncia».
«Tenemos que preguntarnos porque una persona que es violentada no es consciente de ello y porque llegamos a normalizar esas conductas violentas en la relaciones de pareja», ha subrayado Ruiz-Roso.
Ha pedido, al tiempo, mayor especialización y recursos tanto para la Judicatura como para la Abogacía, tras las recortes «brutales» de 2012, y la eliminación de las oficinas de atención, ante el elevado número de sentencias absolutorias y «no se confundan con las denuncias falsas» ni se «cuestione que es la víctima» de maltrato.
La secretaria de Mujer de FeSP UGT CLM no ha olvidado tampoco que en el decálogo de medidas es fundamental la atención a los menores y el refuerzo de las políticas de sensibilización y formación educativa porque «es la vitamina contra la violencia».
En este contexto, y aunque ha reconocido que la Ley regional está «más avanzada y más completa» que la nacional, y que la llegada del nuevo Ejecutivo regional y el trabajo del Instituto de la Mujer ha supuesto «un cambio radical», no ha olvidado que se requiere aún más esfuerzo en las políticas de comunicación y en el cumplimiento de los compromisos internacionales.