El albaceteño Javier Collado Ruano, profesor de universidad en Brasil, fue uno de los 1.500 participantes invitados por la directora general de la Unesco, Irina Bokova, al Foro Mundial de la Educación celebrado entre los días 18 y 21 de mayo en Corea del Sur.
Javier Collado junto a Kailash Satyarthi, Premio Nobel de la Paz 2014.
Ministros de educación y cultura de más de 100 países, jefes y miembros de delegaciones; jefes de agencias y ejecutivos de organizaciones multilaterales y bilaterales; representantes de la Unesco, de la sociedad civil, de la profesión docente y de los jóvenes; Unicef; y el gobierno coreano adoptaron la Declaración de Incheon (ciudad en la que se celebró el foro) «Educación 2030: Hacia una educación inclusiva, equitativa y de calidad y aprendizaje a lo largo de la vida para todos», una declaración en la que tomó parte Javier Collado, un joven de 27 años, natural de Almansa, que puso en marcha en Brasil la ONG Educar para Vivir y que también dirige desde allí la revista Global Education Magazine.
Destacó la presencia del indio Kailash Satyarthi, Premio Nobel de la Paz de 2014, al cual Javier tuvo la oportunidad de conocer personalmente y entrevistar. «Le pregunté sobre la educación en India, donde hay niños esclavizados a trabajar como mano de obra barata». Según cuenta, también hablaron acerca de la importancia de internet, las artes, la música, la espiritualidad y «la rica diversidad cultural para hacer simbiosis entre los pueblos y salir de la crisis económica actual y la crisis ecológica que se avecina a la vuelta de la esquina». Le gustó de él que no lleva nunca guiones preparados para hablar en público y que siempre responde con una sonrisa.
Javier Collado acudió al Foro Mundial de la Educación invitado como periodista en calidad de director de Global Education Magazine, condición que aprovechó para tomar notas sobre lo que se debatía en las ponencias. Además, participó activamente en los foros de las ONG, donde se hizo una declaración conjunta para alcanzar metas educativas en el año 2030. «Aquí aporté la visión en la que vengo trabajando en mi tesis doctoral y en las clases de Relaciones Internacionales que doy en la universidad brasileña». En este sentido, «simpaticé enormemente con los puntos de vista de los activistas indígenas de Guatemala, Bolivia, Ecuador, México, Brasil, Filipinas…».
De Corea se ha traído numerosas experiencias, también la colaboración de más de una docena de socios para trabajar en el sur asiático, África, América Latina y el Caribe. En su opinión, el de Incheon ha sido -por las estrategias educativas aprobadas- el «Foro Mundial de Educación más grande y decisorio celebrado hasta ahora».
«La vida me ha ofrecido la posibilidad de estar ahí aprendiendo e interactúando con todos los asistentes, de gran prestigio internacional, y eso se traduce ahora en mucho trabajo y responsabilidad». Uno de los retos que tiene ahora es concienciar a la ciudadanía a través de la educación sobre el cambio climático, algo que «exige una profunda transformación en nuestros hábitos de consumo y modos de vida». Aquí su apuesta pasa por el proyecto «La vuelta al mundo en 80 escuelas», donde «queremos filmar diferentes escuelas del planeta con métodos particulares de enseñanza». Esta misma semana comenzará dicha labor en el IES «José María de los Infantes» de Utrera (Sevilla).