En abril de 2013 Sergio Aznárez, un joven autista y con discapacidad visual, emprendía junto a su hermano Juanma la aventura de recorrer en tándem los casi 1.400 kilómetros que separan Cuenca de Tinerhir (Marruecos) para encontrarse con Mati, la cuidadora que Sergio había tenido durante su infancia. De esta dura y enriquecedora experiencia ha resultado el documental «La sonrisa verdadera», cuyo trailer acaba de ser presentado en internet.
A partir de ahora el documental de 83 minutos tendrá un recorrido por diferentes festivales. Tal y como explicaba Juanma a Encastillalamancha.es, la agencia de cine independiente Freak -que será la encargada de su distribución- lo llevará en primer lugar a los festivales con premier, debido a su carácter internacional. «Después continuaremos por festivales más pequeños y especializados». Dependiendo de su acogida podría llegar incluso a las salas de cine.
Sea cual sea el recibimiento que tenga este trabajo audiovisual o independientemente del resultado que pueda tener el formato para televisión que empezarán a desarrollar en unos meses, la ilusión y las ganas de sensibilizar al espectador a cerca de la necesidad de impulsar la normalización de personas como Sergio están por encima de todo. Una ilusión de la que se han contagiado numerosas personas que han colaborado con estos hermanos conquenses a través del crowdfunding o simplemente infundiéndoles mucho ánimo, entre ellas caras conocidas como Matías Prat, Hilario Pino, Susana Griso, Helena Resano, Juan Manuel Montilla -conocido como El Langui-, Serafín Zubiri o Emilio Butragueño, quienes grabaron vídeos de apoyo.
Juanma cuenta que el montaje y edición del documental les ha llevado todo un año y que su resultado se deja ver en el rostro de emoción de Sergio cuando lo escucha. «Para él el viaje fue una aventura maravillosa y ahora, a cada paso que damos en su producción y distribución, Sergio se muestra muy contento. Al final este viaje era un regalo para él, algo que le ha ayudado a entender mejor el mundo». De su hermano subraya que «es el mejor compañero de viaje que alguien se puede imaginar porque a su lado vas disfrutando cada momento».