El juzgado de lo contencioso administrativo número 1 de Toledo condena al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) a pagar más de 132.000 euros a una familia de Albacete por una defectuosa praxis médica.
Según la sentencia remitida a Efe por el Defensor del Paciente, el juzgado de Toledo estima parcialmente el recurso presentado por la familia del fallecido, aunque el fallo puede ser recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia de la región.
Los hechos se remontan al 6 julio de 2007, cuando el paciente, J. V.R.J., de 53 años, casado y con dos hijas, y que trabajaba como conductor de ambulancias del Sescam, fue intervenido en el Hospital General de Albacete de una dolencia duodenal y de páncreas.
El día siguiente, el enfermo amaneció muy hinchado, vomitando bilis, con dolor abdominal y la sensación de quemarse por dentro muy agudizada, a pesar de lo cual el enfermo no fue evaluado por ningún cirujano.
Se le realizó un TAC que apreciaba perforación duodenal y pancreatitis e ingresó en UCI y se le intervino de laparotomía y falleció 20 de julio de pancreatitis necrótica y perforación duodenal con signos de irritación peritoneal y otros.
Ahora, el juez recoge la tardanza en ser atendido por este paciente, cuarenta y ocho horas después de detectarse la perforación duodenal.