La Audiencia Provincial de Toledo juzga hoy a un hombre acusado de agredir y violar a su excompañera sentimental en Illescas (Toledo) en 2012, incumpliendo una orden de alejamiento dictada por un juzgado madrileño, para quien el fiscal pide 14 años de cárcel.
Según el escrito de acusación del fiscal, A.R.G. será juzgado por un delito de agresión sexual, otro de resistencia a los agentes de la autoridad que acudieron a detenerle, otro de quebrantamiento de la medida cautelar de alejamiento de la víctima y un cuarto de daños causados en la vivienda de la mujer.
Los hechos se produjeron el día 27 de octubre de 2012, cuando, según el fiscal, el acusado fue a casa de su excompañera sentimental incumpliendo la orden de alejamiento que el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Coslada (Madrid) había dictado en 2011.
Cuando la mujer abrió la puerta de su casa, el acusado la golpeó, insultó y escupió, aunque la mujer no lo denunció por temor a que volviera a regresar y la pegara de nuevo.
Al día siguiente el hombre regresó y la mujer abrió porque él le pidió perdón y por temor a que sus padres se enteraran de lo sucedido, pero cuando el acusado entró en la casa volvió a golpearla, con puñetazos y patadas y agarrándola del cuello, según el escrito del fiscal, y la violó.
El hombre permitió que la víctima saliera de la casa para acudir al trabajo y la mujer presentó la denuncia ante la Guardia Civil de Illescas.
Cuando los agentes fueron a la casa para detener al individuo, el acusado les propinó patadas y puñetazos, aunque no resultaron heridos.
Durante esas horas, el acusado había causado numerosos desperfectos en los muebles de la vivienda de la víctima, valorados en 2.210 euros.
El fiscal pide para A.R.G. 12 años de prisión y la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de la víctima durante 13 años, además de otro año de prisión por resistirse a los agentes, otro año más por haber quebrantado la orden de alejamiento y una multa diaria de 12 euros durante dos años por el delito de daños en el domicilio.
Asimismo, el fiscal pide una indemnización a la víctima por las lesiones, los daños morales y los desperfectos en su casa, y solicita que se mantenga la prisión provisional comunicada y sin fianza para el acusado.