Tres personas han sido detenidas en Talavera después de que uno de ellos comprara cocaína en Madrid y posteriormente se la entregara a dos colaboradores, entre ellos su compañera sentimental, para que la vendieran al menudeo en un punto negro de la ciudad de la cerámica, tal y como ha informado la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha.
Metía entre 500 y 600 gramos de cocaína cada mes
Investigaciones que comenzaron una vez que supieron que había una persona que viajaba unas tres o cuatro veces cada semana a Madrid para hacerse cargo de pequeñas cantidades de droga, para así minimizar posibles pérdidas y riesgos en el caso de que fuera objeto de una intervención policial.
Droga que daba a sus colaboradores para que la vendieran por gramos.
Y fue el 12 de enero cuando estos dos últimos fueron detenidos tras recibir 11 gramos por parte del cabecilla, quien también fue detenido. Tras un registro en su domicilio, los agentes intervinieron 30 gramos de cocaína, 7.000 euros en efectivo y diferentes útiles para la adulteración y la manipulación de la droga.
De esta forma se ha cortado una de las vías de entrada de droga en la ciudad y se calcula que cada mes metían entre 500 y 600 gramos de cocaína.