En la tarde del 14 de abril, un ciudadano llamó al teléfono de urgencias de la Guardia Civil, 062, para comunicar la presencia de un vehículo autocaravana estacionado en una zona de campo entre las localidades de Camarena y Ventas de Retamosa, y que en ese lugar existía un nido de águila Imperial, por lo que desde la Central COS que gestiona este teléfono, se envió una patrulla del SEPRONA de la Guardia Civil de Illescas.
Los agentes recorrieron este amplio espacio y lograron localizar el citado vehículo, ya dentro del término municipal de Fuensalida, y comprobaron la existencia del nido de águila Imperial en el árbol bajo el que estaba estacionado y al propio animal sobre volando la zona.
De Móstoles a Fuensalida, esperando a un hombre
La Guardia Civil identificó a las dos mujeres que había en su interior, de 52 y 74 años, con el domicilio fijado en la localidad madrileña de Móstoles, y al ser preguntadas por la Guardia Civil por el motivo por el que se encontraban allí, manifestaron que estaban esperando al marido de la primera e hijo de la segunda, el cual supuestamente estaba trabajando en una finca agrícola cercana.
La Guardia Civil les ha propuesto a ambas para ser sancionadas por incumplimiento, no sólo una infracción al Real Decreto de Alarma, sino también a la Ley de 9/99 de Conservación de la Naturaleza de Castilla La Mancha por el perjuicio que en periodo de nidificación se ha podido causar al ejemplar de águila Imperial así como por incumplimiento del Decreto 63/2006 sobre uso recreativo, acampada y circulación en el medio natural.
El águila Imperial Ibérica (Aquila Adalberti), se encuentra desde 1990 incluida en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas como “Especie en Peligro de Extinción”, al igual que en el Catálogo Regional de Castilla-La Mancha.